Se acaba el tiempo para ACS. El grupo de construcción y servicios que preside Florentino Pérez apura los plazos para conseguir armar una oferta por Abertis que compita con la presentada por Atlantia y que está pendiente de aprobación por parte de la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV). Y precisamente es este trámite el que va a estrechar en breve el margen de ACS, toda vez que la autorización definitiva del organismo supervisor del mercado se espera de forma inminente.
De esta forma, los próximos días serán de absoluto frenesí para la compañía constructora, que deberá rematar con éxito la labor de lograr armar una oferta que deberá superar en su conjunto los 17.000 millones de euros si quiere competir realmente con la del grupo italiano, valorada en 16.300 millones y cuya contraprestación cuenta con una parte en metálico y otra en forma de canje de acciones.
A finales de la pasada semana, ACS remitió un hecho relevante a la CNMV en el que daba cuenta de que seguía analizando la opción de presentar una OPA por Abertis, tal y como admitió el pasado 21 de julio, aunque aseguraba que la propuesta aún no había sido llevada al consejo de administración.
En el comunicado al supervisor, el grupo constructor también detallaba que entre las alternativas que manejaba estaba la de realizar la oferta a través de su filial alemana Hochtief.
Señales al mercado
Fuentes del mercado apuntan a Vozpópuli que este hecho relevante de ACS se debe a que el proceso de autorización de la OPA de Atlantia sobre Abertis por parte del supervisor está en la recta final. De hecho, la compañía italiana lo esperaba para la primera semana de septiembre, como hizo saber a algunos analistas que cubren el valor para sus respectivas firmas. De las consultas realizadas por Atlantia cabía incluso deducir que la autorización llegaría, en cualquier caso, antes de que finalizara el mes.
Este miércoles, Reuters aseguraba que ACS tomará una decisión definitiva sobre si lanzará o no una oferta por Abertis en el plazo máximo de un mes. La agencia internacional, que citaba fuentes conocedoras de la operación, apuntaba que la probabilidad de que finalmente la constructora se decida por lanzar la oferta superaba el 50%.
"ACS está dando señales al mercado porque sabe que no dispone ya de mucho tiempo para confeccionar la oferta que, por lo demás, es muy complicada", señaló un operador del mercado.
A marchas forzadas
La compañía trabaja intensamente en la oferta desde hace más de tres meses, en los que ha mantenido contacto con numerosos inversores institucionales con el fin de recabar apoyos para financiar la oferta. ACS se ha aproximado a grandes fondos de inversión especializados en infraestructuras pero también a otro tipo de vehículos como fondos soberanos.
La pasada semana también hubo rumores sobre la posibilidad de que el consejo de supervisión de Hochtief llevara a su reunión una ampliación de capital relacionada con la oferta sobre Abertis, aunque el asunto no se trató finalmente en la reunión. Todos los hechos apuntan a que en ACS se trabaja a marchas forzadas en el asunto, a sabiendas de que el reloj juega en su contra.
Tras varias sesiones a la baja, los títulos de ACS recuperaron el miércoles cerca de un 2% y con ello la cota de 31 euros. Mientras, Abertis cerró con moderados descensos pero asentada por encima de los 17 euros por título, precio que se baraja como posible en el caso de que, finalmente, aparezca la contraoferta de ACS.