"Las cañerías vacías", la morosidad mal contabilizada y sin liquidez. Así estaba Banco Popular el 7 de junio cuando Santander tomó su control, según su consejero delegado, José Antonio Álvarez. El número dos de Santander ha dado esta visión en la presentación de resultados del grupo en el semestre, en el que ha anunciado que Popular perderá más de 12.000 millones en este periodo. A pesar de ello, las cuentas de la entidad presidida por Ana Botín no se ven afectadas, ganando 3.616 millones, un 24% más.
Álvarez ha destacado que "en apenas mes y medio ha vuelto la normalidad a Popular": ha recuperado 6.500 millones de los 20.000 millones en depósitos perdidos; y la actividad comercial "va recuperando el pulso". Cuando tomó el control Santander "las cañerías [de concesión de créditos] estaban vacías", apunta el consejero delegado.
Los otros dos frentes donde Popular ha recuperado la normalidad, ha añadido Álvarez, son el capital, que alcanza el 10,5% tras la ampliación (entró en Santander con un -4,9%) y la liquidez, estabilizada tras una inyección de Santander de 13.000 millones (4.000 millones para devolver al BCE).
Sobre los posibles ajustes de costes en Popular, Álvarez ha explicado que primero se harán en los servicios centrales (dentro de 3-4 meses tendrán la cifra) y que los de la red tardará hasta que se haga la integración tecnológica, dentro de 18-24 meses.
Competencia
El consejero delegado ha señalado que espera que en semanas esté la aprobación de Competencia de la compra (sin penalizaciones) y que a partir de entonces tomarán más decisiones en Popular. "Pocas entidades podían asumir una operación como ésta", ha afirmado.
Álvarez ha defendido el precio puesto en la operación (a pesar de las pérdidas de bonistas y accionistas). "Nadie puso uno más alto. Nosotros somos responsables de nuestras decisiones y la Autoridad de Resolución de la suya".
La morosidad de Santander se eleva del 3,55% al 5,37% tras la compra de Popular, y el objetivo es que baje del 5% a finales de año.
Álvarez ha explicado también el cambio rápido de presidente en Popular, que primero fue el director financiero, José García Cantera, y a la semana se cambió por Rodrigo Echenique. "Nos dimos cuenta de que con la ampliación de capital iba a estar un mes fuera de España".
