El consejero delegado de Santander anuncia que en 3-4 meses tendrán una cifra de ajuste para los servicios centrales del Popular y que los recortes en la red llegarán a finales de 2018. Afirma que "las cañerías del Popular estaban vacías" cuando lo compraron y que se salvan 3.000 millones en créditos fiscales. "Pocas entidades podían hacer una operación como ésta".