El consejero delegado del consorcio de empresas públicas y privadas españolas encargado de construir el AVE entre La Meca y Medina, Santiago Ruiz, ha presentado finalmente su renuncia al cargo, en el que no ha durado ni año y medio. Es el cuarto CEO que se baja del tren. La renuncia transciende una vez que el pasado 9 de mayo el consorcio alcanzara un acuerdo con Arabia Saudí por el que el país se comprometió a ponerse al día con los pagos que tenía atrasados y, además, a dar un plazo adicional de catorce meses para terminar los trabajos.
Santiago Ruiz dejará el cargo mientras el grupo contratista aún tiene que negociar con Arabia los sobrecostes del proyecto y después de que el pasado mes de febrero el grupo contratista constituyera dos comisiones delegadas del consejo de administración.
Según se explicó entonces, el objetivo de estas comisiones es apoyar la labor del consejero delegado y favorecer y velar por la unidad de criterio en las negociaciones con el cliente y en la gestión de los intereses de la sociedad. Así, en la actualidad, los contratistas del denominado 'AVE del Desierto' trabajan actualmente en elegir a un nuevo consejero delegado que les represente.
"A veces sorprende el ruido que rodea a una obra como esta, porque la obra va bien", sostiene Piqué
No obstante, Santiago Ruiz permanecerá en el cargo que lleva ocupando desde hace casi dos años, hasta que se designe su sucesor, según informó Josep Piqué, consejero delegado de OHL, una de las empresas del grupo. Tras una intervención en los 'Desayunos de Esade Business School', Piqué indicó que en cuanto a las obras de construcción de este AVE, uno de los mayores contratos logrados por España en el exterior, "van muy bien".
"La obra va bien"
"A veces sorprende el ruido que rodea a una obra como esta, porque la obra va bien y la relación con cliente también va bien, dentro de las normales discusiones que siempre mantienen un cliente y su contratista", indicó el consejero delegado de OHL. El exministro reconoció que el consorcio encargado del proyecto es "muy complejo", dado que está integrado por catorce empresas "y eso a veces hace complicada su gestión".
No obstante, Piqué reveló que el consejero delegado del grupo ha presentado oficialmente su renuncia, con lo que las empresas que lo conforman trabajan actualmente en la selección de un nuevo representante. Además de por OHL, el consorcio que a finales de 2011 se adjudicó el AVE La Meca-Medina está compuesto por las empresas públicas Ineco, Adif y Renfe, y las también privadas Cobra (ACS), Indra, Consultrans, Copasa, Dimetronic, Imanthia, Inabensa y Talgo, además de las firmas saudíes Al Shoula y Al Rosan.
El proyecto del 'AVE del Desierto', estimado en unos 6.700 millones de euros y que actualmente un grado de ejecución del 70%, consiste en construir la denominada 'superestructura' de la línea (las vías y los sistemas de comunicación, electrificación y seguridad), además de su posterior explotación. Una vez en servicio, permitirá unir las dos ciudades santas en dos horas y media.