Los principales bancos españoles han rechazado una propuesta de comisión única desarrollada por Banco de España, con la que se tenía previsto poner fin a la guerra de los cajeros suscitada tras la decisión de Caixabank de cargar con dos euros a los no clientes por utilizar sus cajeros. Una medida que tiene previsto implantar en próximos días tanto Santander como BBVA. El regulador, según fuentes del sector, tenía intención de presentar de forma inmediata esta solución que preveía el pago de una comisión única para el consumidor en el entorno de 1,80 euros en caso de las extracciones en cajeros diferentes a los de su entidad.
Sin embargo, esta propuesta ha saltado por los aires por las enormes diferencias que existen entre las entidades que se han escenificado en diversas reuniones tanto sectoriales como de las diferentes redes en las que se integran el parque de cajeros automáticos en España. Además, la posición de Economía, expuesta este miércoles por el ministro Luis de Guindos, instando al regulador a evitar la doble comisión, también ha servido de acicate para que el tema tenga que resolverlo el propio ministerio, a través de una normativa del Tesoro.
Las entidades con más cajeros, como Caixabank, se verían claramente beneficiados con esta medida
De acuerdo a fuentes financieras conocedoras de las reuniones mantenidas entre el organismo y representantes de los bancos, Banco de España ha trasladado recientemente a asociaciones bancarias y entidades una propuesta consistente en permitir el cobro de una única comisión, en el entorno de los 1,8 euros, que se repartirían entre la entidad propietaria del cajero, que dispondría de dos tercios de la cantidad acordada, y la entidad emisora de la tarjeta, que se quedaría el resto. Con este reparto, las entidades con una red más extensa de cajeros, como es el caso de Caixabank, se verían claramente beneficiadas. Sin embargo, las entidades han rechazado de plano esta propuesta, defendiendo una política de acuerdos bilaterales, como el que ha suscrito Popular como ING. En próximos días, se cerrarán más acuerdos de este tipo.
El organismo presidido por Luis María Linde ha impulsado desde mediados de año los contactos con bancos y asociaciones del sector para trasladar sus propuestas y tratar, sin éxito, de alcanzar un acuerdo. En julio, el Banco de España advirtió en un comunicado que la retirada de efectivo en un cajero automático constituye un único servicio de pago, con independencia de que se realice en un cajero propiedad de la entidad emisora de la tarjeta bancaria o de otra entidad. "En consecuencia, ese servicio solo puede originar el cobro de una comisión, ya sea por la entidad emisora de la tarjeta o por la entidad propietaria", señaló, e instó a las entidades a adoptar "las medidas necesarias para garantizar que, en cada operación, se procede al cobro de la comisión solo por una de ellas".
La actual legislación obliga al pago de una única comisión, pero, también es cierto, que el texto normativo considera que es lícito que tanto el dueño del cajero como la entidad que proporciona el plástico a los clientes tengan derecho a cobrar una cantidad. Ante esa dualidad, y la imposibilidad de que el sector fije un precio, ya que esta medida es contraria a las reglas de competencia, lo que obligaría a intervenir a la Comisión Nacional de los Mercados de la Competencia (CNMC), la institución que preside Luis María Linde tenía previsto fijar la nueva política de comisión única a través de un reglamento. Ahora, sin embargo, tendrá que ser Economía, a través del Tesoro, quien regule esta situación.
La doble comisión ha avivado una guerra en el sector financiero español que ha impulsado alianzas entre entidades para reducir comisiones cobradas por sacar dinero
La doble comisión aplicada por los tres mayores bancos españoles ha avivado una guerra en el sector financiero español impulsando alianzas entre entidades para reducir las comisiones cobradas por sacar dinero de los cajeros. Bankia, Sabadell y EURO 6000 -Kutxabank, Ibercaja, Grupo Liberbank, BMN, Abanca, Unicaja, Caja España-Duero, CajaSur-, y también Caixa Ontinyent, Caixa Pollença y Cecabank, anunciaron el miércoles un acuerdo por el cual en sus 17.730 cajeros el propietario del terminal no cobrará recargo a sus clientes. Además otras entidades financieras que operan en España estarían sondeando la posibilidad de sellar alianzas similares a la anunciada por Bankia, Sabadell, y Euro 6000, según han publicado diversos medios.
El escaso margen de actuación demostrado en este asunto por Banco de España, ante el rechazo de la banca de asumir su propuesta, está generando tensiones entre la entidad y el Ministerio de Economía, que el miércoles se cruzaron mensajes en tono de advertencia. "Si no actúa el Banco de España, actuará el Ministerio de Economía", señalaron fuentes del departamento que dirige Luis de Guindos. Economía, según esas fuentes, no descarta modificar la regulación del sector para evitar que diversas entidades cobren dos comisiones por un solo servicio. Tras publicarse esas declaraciones, desde el Banco de España se indicó que propondrá al Tesoro Público, dependiente del Ministerio de Economía, que estudie la oportunidad de un cambio normativo que clarifique de forma "taxativa" en la legislación sobre transparencia la imposibilidad de cobrar una doble comisión por la extracción de dinero en efectivo de los cajeros.