En seis meses, la nómina de aspirantes a convertirse en el nuevo dueño del Banco de Valencia ha quedado reducida a tres nombres: BBVA, Bankinter y La Caixa. Estas tres entidades cuentan ya con equipos de trabajo en la sede del propio banco valenciano estudiando sus cifras, según aseguran a Vozpópuli fuentes del sector. El grupo Santander, por contra, aún no se ha interesado por el proceso, ni parece que vaya a siquiera a iniciar el estudio de la operación. Su gran objetivo es Catalunya Caixa, como informó ayer este medio, para balancer su escasa presencia (8% el Santander; 4%, Banesto) en la comunidad catalana.
El desembarco de los equipos de estas tres entidades se produjo a lo largo de las últimas semanas, antes de que el FROB, los nuevos gestores del Valencia, comunicarán el pasado viernes que se reiniciaba la subasta suspendida en mayo. Entonces, en la lista de posibles compradores aparecían también BMN, Ibercaja, Kutxabank, Santander, Liberbank y Popular.
Dede entonces, los financieros de estas tres entidades estudian al detalle la actual situación financiera del Banco de Valencia, que nada tiene que ver con las cifras de la 'due diligence' de mayo. El comprador recibirá una entidad que ya tiene hecha buena parte de su ajuste de red y plantilla. El actual ERE afectará a 360 empleados e implicará el cierre de 67 oficinas, la mayoría de la denominada red exterior del banco (es decir, la situada en las Comunidades autónomas de Aragón, Cataluña, La Rioja, Navarra y Málaga). Además, los activos tóxicos del Valencia serán transferidos al banco malo a lo largo del próximo mes de diciembre.
Si no hay cambios en el proceso, se ha suspendido la fase de ofertas no vinculantes para acudir a una única propuesta que decidirá el nuevo dueño de la entidad valenciana
A diferencia del proceso suspendido, tanto el FROB como el Banco de España quieren acelerar la venta, simplificando el proceso para que el Valencia tenga nuevo dueño antes de final de año. De hecho, está previsto, salvo cambio en el nuevo calendario, suspender la fase de ofertas no vinculantes por una única propuesta que será la que determinará al nuevo dueño.
Entre los tres aspirantes, Bankinter y La Caixa son las entidades que se están mostrando más activas en el proceso de 'due diligence', según explican fuentes conocedoras del proceso. "Hay más frialdad en el caso de BBVA. Se nota porque sus equipos no son tan prolijos en la información que solicitan", confirman estas fuentes.
La compra del Banco de Valencia permitiría al grupo presidido por Isidro Fainé llegar a la cuota del 10% en el mercado mediterráneo, frente al 7% actual, un nivel mínimo que tiene La Caixa en buena parte del mapa financiero español.
Los aspirantes al Banco de Valencia comprarán, en realidad, los mejores activos de esta entidad, puesto que el FROB tiene previsto liquidar su cartera más deteriorada. Este último proceso puede suponer un coste de más de 7.000 millones para el Fondo de Reestructuración Ordenada Bancaria (FROB), actual propietario del Valencia, según un informe elaborado por Nomura para este organismo, al que ha tenido acceso este medio.
Según Oliver Wyman, Banco de Valencia presenta un déficit de capital de 3.462 millones de euros en el escenario más estresado.