Estados Unidos ha abierto sus puertas al vino azul de la empresa GIK Live, de Portugalete (Bizkaia), a la que España impide vender su bebida como vino. En sólo tres años la compañía ha logrado revolucionar el sector vinícola comercializando el producto en países de todo el mundo. El desembarco en Estados Unidos supone la llegada a un mercado en el que los artículos alimenticios extranjeros tienen farragosas barreras de entrada pero en el que, una vez dentro, el crecimiento previsible es enorme, el que se le supone al mayor mercado del mundo.GIK Live, creada por cinco jóvenes socios hace tres años (tienen entre 20 y 30 años), adquiere la uva con la que produce su vino de distintas bodegas españolas, que luego transforma en Gik Blue. El color azul se consigue a través de procesos tecnológicos de pigmentación del vino, una tecnología desarrolada por la empresa en colaboración con la Facultad de Ingeniería de la UPV-EHU.Mientras que en España la compañía tiene prohibido comercializar la bebida con etiquetas en las que se mencione la palabra 'vino', en Estados Unidos el regulador de bebidas alcohólicas y tabaco -Alcohol and Tobacco Tax and Trade Bureau- ha permitido recientemente a la empresa venderlo como tal, y así constará en el etiquetado de las botellas."Cuando creamos el producto tuvimos en mente el mercado estadounidense, porque sabemos que es un gran consumidor y que está abierto a cosas nuevas", comenta Taig Mac Carthy, uno de los cinco fundadores de GIK. "En cuanto empezamos a comercializarlo en España nos llegaron pedidos de Estados Unidos, pero los permisos y la logística necesaria para hacerlo no es sencilla".
Sólo ayer lunes la empresa recibió 150 reservas de pedidos procedentes de Estados Unidos
El pasado año el sector español del vino entró en cólera ante la intrusión de GIK e impulsó que los reguladores impidieran a la compañía vender el producto como vino. Tampoco puede hacerlo en el resto de países de la Unión Europea. En India o Corea del Sur sí que puede venderlo como vino; en otros mercados tienen que comercializarlo como derivado del vino; y en Brasil, sencillamente, no pueden venderlo. La empresa está recogiendo firmas en la plataforma change.org para exigir que se le permita vender la bebida en España como vino."En nuestro segundo año de vida ya vendíamos el vino azul sin ningún problema no sólo en Europa, también en Japón, Corea del Sur, o México", señala Mac Carthy. "Pero la prohibición en España a venderlo como vino nos paralizó todo". El socio de GIK Live explica que en 2016 ya tenían todo preparado para vender su bebida en Estados Unidos, pero la medida impuesta en España impidió continuar con los trámites. "Tuvimos que devolver el dinero de todas las reservas que nos habían hecho", lamenta Mac Carthy. Pero ahora todo ha cambiado. Sólo ayer lunes el grupo español recibió 150 reservas de pedidos de su vino de color azul procedentes de Estados Unidos. "Es alucinante, es gente que está pagando por un producto totalmente nuevo y que le llegará dentro de un mes", exclama.https://www.youtube.com/embed/SOVlqGW9iNwTiendas de Miami, Boston, y Texas serán las primeras en vender el vino azul de GIK Live. Después, previsiblemente, lo harán otras de Nueva York, Michigan, Nevada, California, y Washington. La empresa ha tenido que abrir una oficina en el país y trabajar en cada Estado con un importador que tiene que cumplir determinados trámites legales ineludibles.La compañía adapta el sabor de su vino azul a cada mercado. En Japón, el sabor es seco, mientras que en Estados Unidos la uva empleada para su producción será más dulce. España es el octavo mayor mercado de GIK Live, estima Taig Mac Carthy; los japoneses, los griegos, o los holandeses consumen más vino azul que los españoles.