Apenas tres semanas después de haber sido nombrado consejero delegado de ACS, Marcelino Fernández Verdes comienza a tomar decisiones en el grupo de construcción y servicios. La primera de ellas ha sido contar con uno de sus más estrechos colaboradores en la filial australiana Cimic, que aún preside. Se trata de Ángel Muriel, que hasta ahora ejercía como director financiero en la compañía oceánica y al que el propio Fernández Verdes reclutó para Cimic cuando se hizo con las riendas de la empresa.
Muriel es un veterano dirigente en ACS, especialmente en su división de concesiones de infraestructuras Iridium, de la que llegó a ser el máximo responsable. En 2015, poco después de llegar a la presidencia de Cimic, Marcelino Fernández Verdes decidió ficharle como director financiero de la empresa australiana como relevo de otro español, Javier Loizaga. Un movimiento que provocó sus más y sus menos con el presidente de ACS, Florentino Pérez.
Precisamente, Loizaga, hijo del histórico consejero de ACS José María Loizaga, contaba con las bendiciones de Pérez para ocuparse de las finanzas de Cimic. Sin embargo, Fernández Verdes no pensaba de la misma forma. Apenas un año después de su nombramiento, Javier Loizaga dejaba la compañía y dejaba paso a Muriel, que ha tenido que lidiar con un intenso plan de ajuste en Cimic, plagado de desinversiones para sacar a la empresa de la complicada situación financiera en la que se encontraba.
La labor de Muriel no ha pasado desapercibida para Fernández Verdes, que ahora le quiere cerca en ACS para su nueva labor como consejero delegado. El ejecutivo asturiano seguirá siendo el principal responsable de Cimic, aunque para compatibilizar los cargos cuenta con la absoluta confianza de Adolfo Valderas, a quien le cedió el pasado otoño el puesto de consejero delegado de la empresa australiana que hasta ese momento también ostentaba.
Nuevo regreso
El de Muriel no será el único retorno a ACS desde el exterior sino que se une al de José Antonio López-Monís, que regresa al grupo tras un tormentoso paso por los negocios del grupo en Oriente Medio. El ejecutivo llegó a ser detenido en Dubai en el marco de una rocambolesca maniobra enfocada sobre Habtoor, compañía participada por la propia Cimic.
Fernández Verdes fue nombrado consejero delegado de ACS el pasado 11 de mayo, después de que la junta de accionistas de la compañía aprobara días antes su incorporación al grupo como consejero ejecutivo. Su aterrizaje se producía casi tres años después de que Florentino Pérez le designara públicamente como su sucesor en la compañía aunque, por el momento, él sigue ejerciendo como presidente ejecutivo del grupo.