La agencia de calificación de riesgos Fitch ha situado en vigilancia negativa la nota de algunas de las principales eléctricas con operaciones en España. Entre ellas se encuentran Endesa y su matriz Enel, Iberdrola, Gas Natural Fenosa y EDP.
Estas empresas, que tienen actualmente un rating de BBB+ (primera nota dentro d ela calidad aceptable) salvo EDP, podrían ver deteriorados sus flujos de caja y sus parámetros crediticios como consecuencia de la reforma energética anunciada el pasado viernes por el Gobierno para acabar de forma definitiva con el déficit de tarifa.
Fitch da por hecho que la reforma saldrá adelante gracias a la mayoría absoluta del Partido Popular en el Congreso, pero desconoce el calendario que se maneja. Así, la agencia atenderá a los cambios que se vayan produciendo en adelante en los planes estratégicos de las empresas y seguirá la evolución de sus parámetros crediticios.
En todo caso, da por hecho que se producirá una "significativa reducción de inversiones en el sector". A su juicio, esta medida es una de las pocas decisiones que pueden tomar las eléctricas para contrarrestrar los efectos de la reforma energética sobre su perfil crediticio.
De todas las eléctricas en revisión, EDP es la de peor rating, de BBB-, esto es, un escalón por encima del grado de especulación, comúnmente conocido como 'bono basura'.