Los mercados se han empeñado en complicar la desinversión del Estado en Bankia. Cuando ya estaba casi todo listo para que el Fondo de Reestructuración (Frob) iniciara la venta de un 7% de la entidad nacionalizada, las caídas en bolsa de las últimas semanas han enredado esta misión.
El ministro de Economía, Luis de Guindos, anunció en julio que el fondo público estudiaría después del verano la venta de un 7% de Bankia. Para ello, ya cuenta con asesor, el banco de inversión Nomura. Si el Frob hubiera vendido a comienzos de julio dicho paquete accionarial (cuando estaba en niveles máximos desde 2015) hubiera obtenido en torno a 930 millones. Esta semana hubiera ingresado 780 millones, 150 millones menos.
Al margen de que los mercados son incontrolables y que la caída de Bankia en el parqué ha sido generalizada entre los bancos, no es la primera vez que esto le ocurre al Frob. En 2014, el fondo presidido por Jaime Ponce llevó a cabo la primera (y única) desinversión en Bankia, al vender un 7,5% por 1.304 millones.
La operación sorprendió al mercado y fue calificada como un éxito. Pero para distintos banqueros de inversión consultados por este medio sentó un mal precedente. Lo hizo porque el Gobierno transmitió que habría más desinversiones cuando la cotización de Bankia superara el primer precio de venta, 1,51 euros (6,04 euros tras el contrasplit). Desde entonces el banco no ha vuelto a alcanzar ese nivel.
Críticas
Para las mismas fuentes, es un error haber anunciado otra vez con antelación la desinversión del Frob: "Las operaciones corporativas no se hacen públicas hasta que ya están todos los detalles cerrados", apuntan.
La motivación del Frob en este caso es distinta. Ha decidido esperar a después de verano para no distorsionar la fusión de Bankia y BMN, sus dos participadas en las que tiene en torno a un 65% del capital. Esta fusión se aprobará la próxima semana (el 14 de septiembre) en las juntas extraordinarias de accionistas de los dos grupos. El Gobierno quiere lanzar un mensaje rápido al mercado y las autoridades comunitarias de que la fusión ayudará a recuperar más dinero público, y no hay otra forma de hacerlo que con una venta en mercado. Sin embargo, desde que se anunció la fusión a finales de junio el valor de Bankia en bolsa ha caído 835 millones, casi el mismo valor que el banco asignó a BMN.
Hay un factor que mitiga la caída en bolsa de las últimas semanas: el Frob ha recibido gratis un 7% de Bankia en los últimos dos años. Cuando vendió el 7,5% en 2014, se quedó con un 60,8% del capital del banco presidido por José Ignacio Goirigolzarri. Desde entonces ha ido elevando su participación por las demandas de la salida a bolsa. BFA (matriz de Bankia) se quedó con las acciones de los inversores perjudicados a cambio de devolverles el dinero. Esta participación recibida de forma indirecta tiene una parte de gratis ya que no ha exigido desembolso del Frob, pero es dinero que ha dejado de recibir de BFA.
Mientras se espera esta nueva desinversión en Bankia, el Banco de España hizo público este jueves la actualización del cálculo del coste del rescate. Según datos del regulador de 2016, el Estado podría perder 14.000 millones en Bankia y BMN. Está en manos del Ponce y Goirigolzarri mitigar este impacto.