Empresas

Las empresas del cabecilla de la mafia china declaraban pérdidas o beneficios mínimos

Las principales compañías de Gao Ping y su mujer registraban en sus balances pequeña ganancias o números rojos pese a reconocer millones de euros en ingresos. El matrimonio disfrutaba de un alto nivel de vida y la Policía encontró en una de sus naves 5,3 millones de euros en efectivo.

  • Imagen de Gao Ping extraida del vídeo que aparece en la web de la fundación cultural que preside.

Tenía en un nave del Polígono Cobo Calleja de Fuenlabrada 5,3 millones de euros en efectivo y, sin embargo, en el balance de cuentas de sus empresas los número rojos eran habituales. Gao Ping, presunto líder de uno de los clanes familiares chinos desmantelados en la Operación Emperador-Cheqian contra el blanqueo de dinero, aparecía como responsable de trece empresas, en la mayoría de las cuales las cuentas de resultados arrojan pérdidas o, en el mejor de los casos, ganancias mínimas. Algo parecido ocurría con la decena de compañías en las que su mujer, Yang Lizhen, aparecía con responsabilidades. Pese a ello, el nivel de vida de la pareja era muy elevado y las inversiones en arte contemporáneo, una constante. Ambos prestaron este sábado declaración ante el juez Fernando Andreu, que dirige la investigación sobre la trama, quien ordenó su ingreso en prisión.

Gao Ping aparece como directivo de trece empresas. Su mujer, Yang Lizhen, de otras diez

La principal empresa del entramado de Ping era International Trade City Import-Export SL, creada en 2001 y cuyo objeto social era en un primer momento la importación y venta de "productor alimenticios, flores y plantas, prendas de vestir y sus complementos, juguetes, artículos electrónicos, de cuero y plástico". Más tarde lo amplió e incorporó al mismo la "construcción, reforma, compra-venta, arrendamiento, creación y gestión de centros comerciales". En ella, Gao Ping aparecía como administrador único, mientras su mujer era apoderada. Según el último balance público de la empresa, referido al ejercicio de 2007, la empresa vendió por un valor superior a los 1,8 millones de euros. Una cantidad que, sin embargo, sólo le reportó a Ping 18.790 euros de beneficios. Además, las cuentas reflejaban desde el año 2005 un acusado descenso de la facturación. Aquel año se elevó a 4,4 millones de euros, más del doble que sólo dos años después.

Pese a ello, esta compañía seguía siendo la 'joya de la corona' del imperio empresarial que había montado Gao Ping en España. Alrededor de ella gavritaban el resto de firmas que había constituido en los últimos años y que en la mayoría de los casos tenían también como objeto social la importación de productos 'made in china' para su posterior comercialización en España. De hecho, la investigación ha demostrado que la práctica totalidad de las tiendas 'todo a 100' de España tenían contactos comerciales con algunas de ellas. Una de estas era Ya Fang SL, en la que el empresario ahora detenido aparecía también como administrador único y donde su esposa llegó a figurar como coadministradora, aunque había causado baja en este puesto. En 2006, último dato del que consta sus balances, la compañía ingresó 428.018 euros y consiguió un beneficio de 45.797 euros. Esta empresa, pese a que la crisis aún no se había declarado, también había visto reducir sus ingresos declarados respecto a los doce meses anteriores, cuando facturó 514.525 euros.

Millonarias ventas, magros beneficios

Algo similar ocurrió con Gold City S.L., de la que Goa Ping fue administrador único y en la que aparecían en su equipo directivo otros imputados. como el empresario español Rafael Pallardo, La companía facturó en 2010 algo más de 3 millones de euros para obtener un magro resultado de 4.140 euros de beneficios. Como en Ya Fang SL, en esta empresa los resultados también había iniciado un sospechoso descenso de las ventas declaradas de un 30% en sólo tres años. También tuvieron raquíticos los resultados de Guo Mao City SL, en la que Yang Lizhen era apoderada y que en 2010 obtuvo poco más de 15,000 euros de beneficio. Y Euro Madrid Import Export SL, que pese a facturar más de 7 millones de euros en ese ejercicio sólo reportó 25.000 euros de ganacias, según se refleja en las cuentas oficiales presentadas en el registro.

Peores resultados tuvieron, sin embargo, otras compañías de la pareja, que arrojaron números rojos. Así, EM Home Trading SL, en la que Lizhen ejercía también de apoderado, arrojó unas pérdidas de 500 euros, sin reflejar ningún tipo de actividad. Nuevo City Gran Oriental SL, dedicada a la reconstrucción de inmuebles y en la que Gao Ping aparecía como administrador, perdió en 2010 41.641 euros. Aunque la que peores resultados arrojó fue Euro Fuenlabrada Import-Esport SL, que pese a tener una facturación de 3,6 millones de euros produjo unas pérdidas de cerca de 350.000 euros.

En una caja fuerte en el sótano de su casa, el matrimonio tenía medio millón de euros para los gastos del 'día a día'

Pese a estos discretos resultados declarados, el matrimonio mantenía un alto nivel de vida que incluía un enorme chalé en Somosaguas (Madrid), varios vehículos de lujo, numerosas adquisiciones de obras de arte, galerías de arte en Madrid y Pekín, y una caja fuerte en el sótano de su domicilio con medio millón de euros en efectivo para los gastos del 'día a día'. De hecho, Ping y su mujer eran casi reverenciados por el resto de comunidad china, que conocían su poder. "Las empresas eran en realidad su tapadera para justificar sus ingresos, aunque realmente lo que les proporcionaba poder y dinero eran su compleja red de contrabando y blanqueo, que acompañaba con usura y extorsiones", aseguran fuentes cercanas a la investigación. Éstas añaden que sus compañías deficitarias o escasamente productivas le servían para hacer llegar a España decenas de contenedores con productos que o bien no declaraba o bien lo hacía por un valor mucho menor del real.

"Luego vendía esos productos a otros mayoristas y minoristas, a los que cobraba en negro y sin factura", detallan estas fuentes, que consideran que con ello obtenían unos beneficios muy altos que supuestamente debían blanquear y que explican que en el día que se registró sus naves en el Polígono de Fuenlabrada se encontraran 5,3 millones de euros en billetes de 500, 200, 100, 50 y 20 euros. "Parecía preparado para sacarlo del país rumbo a China, donde pensaba reinvertirlo en las propiedades y negocios que allí controlan su padre y su hermana", añaden. Los investigadores calculan que al año podían lavar unos 160 millones de euros año, una cifra muy alejada de los beneficios que oficialmente presentaba su emporio lleno de números rojos y beneficios de sólo cinco cifras.

Apoya TU periodismo independiente y crítico

Ayúdanos a contribuir a la Defensa del Estado de Derecho Haz tu aportación Vozpópuli