Discurso lleno de significado para Luis de Guindos en el Congreso de los Diputados. Más allá de que fuera su cumpleaños, la comparecencia del martes pudo ser la última del actual ministro de Economía en el cargo, ante el pistoletazo de salida que se dará la próxima semana a la carrera para ser vicepresidente del BCE.
Por ello, la comparecencia ha llegado en un buen momento para el ministro, para poder hacer balance y méritos antes de su posible salida. La parte negativa fueron las críticas recibidas por parte de algunos diputados y tener que dar aclaraciones sobre cuestiones como las cuotas de la CAM.
Guindos subrayó que el rescate "sirvió para evitar la salida de España de la zona euro" e hizo sus propios cálculos sobre el coste de las ayudas a la banca, de las que, según el ministro, podrían recuperarse cerca de la mitad.
Así, según el ministro ya se han recuperado 9.000 millones de euros del rescate entre ventas de nacionalizadas, intereses, devoluciones, dividendos y otros conceptos. Guindos cree que deben añadirse otros 10.000 millones del dinero reintegrado a preferentistas (8.000 millones) y accionistas de Bankia (cerca de 2.000 millones), aunque este cómputo nunca entra en los cálculos oficiales.
Guindos cree que la perspectiva de subida de tipos va a jugar a favor de Bankia y el Frob
"Nos queda un 61%, que minimizaremos con la participación" en Bankia-BMN. Esta participación vale a día de hoy unos 7.500 millones: "Vamos a maximizar el retorno para el contribuyente. Hay una variable importante, los tipos de interés. En tres-cinco años van a ir al alza, y se va a notar muy positivamente en la cotización", aseguro el ministro. De ser así, Guindos da a entender que se devolverán en torno a 30.000 millones, la mitad de las ayudas.
Más allá de las estimaciones del rescate, el discurso de Guindos estuvo marcado por las referencias a Rodrigo Rato, al que nunca mencionó de forma directa. Pero le reservó una revancha para su segunda intervención, desmintiendo la versión del exvicepresidente del Gobierno.
Choque con el PSOE
El choque más contundente de Guindos fue con el portavoz del PSOE, Pedro Saura, que le llamó "mentiroso compulsivo". Para el ministro, fue una hábil estrategia ante "el papelón" de Saura, ya que el Gobierno de Zapatero fue el que tuvo la capacidad de tomar medidas contra la burbuja, y no lo hizo, y para capear la crisis financiera desde 2008, en lugar de actuar tarde.
Guindos también tuvo palabras para el Banco de España con el que tanta veces ha chocado en su mandato. Dio a entender que el regulador dio por buenos los 50.000 en provisiones que Guindos dijo en 2012 que faltaban a la banca española, muy criticados por el PSOE y Ordóñez.
Sobre Banco Popular, se lavó las manos respecto a las retiradas de depósitos de las administraciones públicas ("sólo representaron en el 30%"). Y justificó que "Economía no es responsable de todo", ya que la crisis de la entidad estaba en manos del BCE, la JUR, el Frob y el Banco de España. "Se nos cortó el tiempo", añadió.