ACS prácticamente duplicó sus ventas en el primer semestre del año, hasta contabilizar 18.833 millones de euros, aunque registró pérdidas por valor de 1.233 millones de euros, frente a las ganancias de un año antes, debido a diversos factores extraordinarios relativos a su inversión en Iberdrola. La compañía comunicó este viernes a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) que tanto la venta de un 3,69% de Iberdrola como el deterioro de la participación que aún mantiene (14,7%) han tenido un gran impacto negativo en la cuenta de resultados del grupo que no ha podido ser compensado por otros extraordinarios.
La compañía atribuye el aumento de la facturación a la consolidación de su participación en Hochtief y explica que, en términos comparables (teniendo en cuenta a la alemana en el primer semestre de 2011), las ventas habrían crecido el 6% si bien habría obtenido un beneficio neto de 380 millones, el 16,7% inferior al de un año antes.