Un tercio de las compañías del Ibex 35 tienen una deuda financiera neta superior a su capitalización bursátil. Entre ellas están gigantes como Telefónica, Iberdrola, Gas Natural-Fenosa y la mayoría de las constructoras. A los precios de cierre de este lunes, doce de las 27 firmas no financieras del selectivo están en esa situación, resultado del desplome de las cotizaciones en el primer semestre de este año, el segundo peor de la historia del Ibex. Hasta junio, el selectivo se ha dejado un 19,6%, caída sólo superada por el retroceso del 20,6% del mismo periodo de 2010.
Destacan dos sectores: la construcción, víctima del estallido de la burbuja inmobiliaria, y la energía. En el caso de las constructoras, cinco de las seis empresas de este sector (la única que se salva es Ferrovial) tienen un valor bursátil inferior a la deuda declarada en sus cuentas del primer trimestre.
El caso más dramático es el de Sacyr, con una deuda que multiplica por 14,2 veces su valor bursátil. Actualmente, este es de 634 millones de euros, frente a los casi 16.500 millones que llegó a valer en 2007. A continuación figuran FCC (con una deuda que multiplica por 5,3 veces su capitalización); OHL (3,38 veces); Acciona (2,69 veces) y ACS (2 veces).
Abertis, con un fuerte peso en el sector de las infraestructuras, tenía a finales de marzo una deuda de casi 12.500 millones de euros, que equivale a 1,5 veces su deuda.
En cuanto a las energéticas, al sector le está pesando lo que se aventura de la reforma que ultima el Gobierno para acabar con el gigantesco déficit de tarifa eléctrico (más de 24.000 millones, y subiendo), que se ha retrasado sucesivamente (en principio, se aprobará en esta quincena) y que anticipa recortes para todos los operadores (eléctricas tradicionales y grupos de renovables).
Así, actualmente dos de las tres eléctricas tienen un valor bursátil inferior a su deuda: Gas Natural-Fenosa (1,6 veces, o 1,5 veces, si se cuenta el déficit tarifario que aún no se ha titulizado y que todavía soporta en su balance) e Iberdrola (1,4 veces, y 1,3 veces sin contar el déficit). Endesa está lejos de esa situación (su deuda es 0,66 veces su capitalización). Es la menos endeudada de las tres y, además, apenas un 8% de su capital cotiza en bolsa (el resto está en manos de la italiana Enel).
Por su parte, Abengoa, con una fuerte presencia en renovables, y un descenso del 34,75% en su valor bursátil desde enero, tiene una deuda de 6.447 millones, 6,7 veces superior a su capitalización.
En menor medida, también destacan los casos de Gamesa (que debe 1,5 veces lo que vale en bolsa) y Red Eléctrica (REE), cuya capitalización (4.684 millones) es ligeramente inferior a su deuda financiera (4.801 millones). Muy cerca de esa situación (0,99 veces su deuda) está su homólogo gasista, Enagás. Fuera del ámbito energético, la multinacional ArcelorMittal también se acerca a ese punto: vale 18.604 millones en bolsa y tiene una deuda de 18.934 millones.
La caída bursátil, que ha llevado al Gobierno a restaurar el mes pasado los blindajes accionariales (que ningún accionista pueda votar por más del 10% en las juntas, aunque tenga más acciones) para contrarrestar posibles operaciones hostiles, también se ha dejado notar en Telefónica, hasta no hace mucho la mayor empresa española por capitalización. A 31 de marzo, la compañía tenía una deuda de más de 57.000 millones, que equivale a 1,2 veces su valor bursátil actual.
Con las agencias de rating al acecho y la nota de la deuda soberana española al borde del bono basura, la deuda se ha convertido en uno de los principales quebraderos de cabeza de buena parte de las grandes compañías españolas. Las 27 empresas no financieras del Ibex, cuya capitalización conjunta es de más de 241.500 millones a los precios actuales, cerraron el primer trimestre del año (último dato disponible) con una deuda de 220.863 millones. Hay cuatro empresas del selectivo que no tienen deuda: Inditex, Mediaset, BME y Técnicas Reunidas.