¿Cómo un ministro y su número dos pueden contradecirse intencionadamente en un periodo tan corto de sólo cinco días en un tema tan sensible para la ciudadanía como es el Castor, sus terremotos, su cierre y quién pagará la indemnización a su dueño, Florentino Pérez?
Lo explica con claridad una fuente del sector energético conocedora de lo que se cuece en las cocinas del Ministerio de Industria y Energía. “Hay una guerra declarada entre el titular de la cartera (José Manuel Soria) y su secretario de Estado de Energía (Alberto Nadal) y el problema del Castor no ha hecho más que poner de manifiesto”.
El hermano del jefe de la Oficina Económica de Moncloa dijo el pasado viernes que “en ningún caso” los consumidores del gas pagarán la indemnización que se le abonará a ACS si finalmente se cierra el almacén de gas subterráneo Castor, que en septiembre provocó más de 500 terremotos.
Nadal, en un encuentro con periodistas, aseguró que el Gobierno hará todo lo posible para que el coste de cerrar el Castor no se cargue a la parte regulada de la tarifa, lo que técnicamente se denominan peajes, que representa en torno a un tercio del recibo del gas que pagan los consumidores.
Cinco días más tarde, Soria se dejaba caer con todo lo contrario: si la empresa concesionaria (ACS a través de su filial Escal UGS) renuncia finalmente al Castor, “se le pagará el valor residual a través de los peajes”. Es decir, que según el ministro serán los consumidores de gas los que costearán los 1.400 millones de euros en los que se ha fijado provisionalmente el valor residual de la infraestructura, a la espera de que lleguen las auditorías económicas solicitadas por Industria.
El ministro cree que los 1.400 millones de euros de valor residual del Castor se han de cargar a los peajes, que suponen en torno a un tercio del recibo del gas de los hogares
En una entrevista con Expansión, el ministro enmendaba la plana a su número dos. Los consumidores han de ir preparándose para pagar a través del recibo el coste del Castor por los próximos lustros.
Aún así, todo está por decidir, porque hasta que los bonistas no den el ‘sí’ a la propuesta de ACS de devolver al Estado la concesión, Industria no moverá un dedo.
El Ministerio tendrá que ‘comerse’ el almacén de gas, que se podría aparcar en un banco malo o ser nacionalizado y abonado al que lo construyó, que se gastó 1.700 millones de euros frente a los 700 millones inicialmente previstos.
Álvaro aspira a relevar a Guindos en Economía y Alberto toma posiciones para hacer lo propio con Soria en Industria
Será la auditoría la que fijará el valor residual del Castor y, a partir de ahí, el Gobierno, y no sólo Industria, tendrá que tomar una decisión salomónica al respecto.
Mientras tanto, Soria y Nadal se hacen la guerra de guerrillas a poco que pueden. Si Álvaro Nadal aspira a sustituir a Luis de Guindos en el Ministerio de Economía, su hermano gemelo trabaja denodadamente en hacer lo propio en Industria. Los dos cuentan con grandes aspiraciones y apoyos para ser ministros de Rajoy.
Tanto el Castor como la reforma energética y los ajustes a las energías renovables han servido de excusa para que ambos políticos expongan, principalmente en privado, sus diferencias a la hora de afrontar las cuitas del Ministerio.
Nadal, a poco que puede, asume la cartera si Soria anda de viaje oficial.