Opel pertenece en la actualidad a Stellantis. Esta multinacional con sede en Países Bajos se formó a comienzos de 2021, con una “fusión entre iguales” entre el grupo Fiat Chrysler (que a su vez procede de la unión entre la italiana y la estadounidense) y el grupo francés PSA (sus marcas más famosas eran Peugeot y Citroën, aunque además englobaba la también francesa DS Automobiles, la inglesa Vauxhall Motors y la alemana Opel). Pero su origen se remonta al siglo XIX.
Adam Opel, nacido en la ciudad de Rüsselsheim (donde aún está la sede central de Opel) en 1837, era hijo de un maestro cerrajero y, como sus dos hermanos, empezó trabajando en el taller de su padre. Lo más novedoso de su juventud fue un viaje a París en el que queda prendado de las máquinas de coser, y vuelve con la idea de montar una fábrica para producirlas, algo que consigue en 1863. Le va bien y en 1868 se casa y de ese matrimonio nacen cinco hijos (Carl, Wilhelm, Heinrich, Friedrich y Ludwig) que en el futuro entrarían en el negocio fundado por su padre.
En 1870 introduce una nueva máquina de coser con el nombre de su esposa, Sophia. Adam no llegó a ver a su empresa fabricando coches, pero sentó las bases para entrar en el negocio del transporte debido a su amor, dicen que inducido por la pasión de sus hijos, por la bicicleta. Suya es la frase "En ningún otro invento lo útil y lo placentero están tan estrechamente relacionados como con la bicicleta". En 1886 empieza a fabricarlas y venderlas.
En 1895 Adam Opel muere sin ver cómo en 1898 Opel llega a ser el mayor fabricante de bicicletas del mundo. Sus hijos Wilhelm y Friedrich, convencidos de que había que evolucionar, visitaron la Exposición Alemana del Automóvil de Berlín y se convencieron de la necesidad de entrar en ese nuevo negocio. Friedrich Lutzmann, cerrajero como su padre, ya se había interesado por el nuevo invento y Opel compra su primitiva instalación y una patente. Con ella en 1899 sacan a la venta su primer automóvil, un rotundo fracaso.
Rompen con Lutzmann y Wilhelm, Friedrich y Carl se desplazan en 1901 al Salón del Automóvil de París y regresan con una licencia para fabricar 100 vehículos utilitarios de la marca Darracq, que llevarían el nombre Opel sobre sus radiadores. Pero es en el Salón del Automóvil de Hamburgo de 1902 cuando Opel presenta su primer modelo propio. Durante años, los hermanos Opel continuaron perfeccionando sus vehículos. Lo curioso es que ese éxito no impidió que durante años siguieran vendiendo máquinas de coser, bicicletas e incluso motocicletas.
La diversificación de Opel
En 1907 fabrican un coche de 60 caballos y Opel recibe el premio Kaiser como mejor automóvil alemán y es nombrado proveedor de la corte, aunque su mayor éxito de comienzos de siglo ocurre en 1909, cuando introduce un coche compacto a un precio asequible, un biplaza de 4/8 caballos, que acaba siendo conocido con el nombre de «Doktorwagen» (coche del médico). Sin embargo, no se centran sólo en una gama concreta y en 1914 desarrollan su primer coche de carreras; de hecho en 1919, recién acabada la I Guerra Mundial, inauguran un circuito ovalado de curvas inclinadas y asfaltado que es la primera pista permanente de carreras y pruebas de Alemania.
En 1924, tras una gran inversión, fueron pioneros en Alemania en la adopción de la línea de ensamblaje, método de fabricación (inventado por Henry Ford ya en 1913) que permitió rebajar los precios y producir un nuevo coche, el PS 4/12, también conocido por el nombre de Laubfrosch (rana verde), por su forma y su color, con el que superaron las 100.000 unidades fabricadas.
Justo un año antes de la Gran Depresión, Opel es, con diferencia, el mayor fabricante de coches alemán con una cuota de mercado en el país del 37,5%. Sale a cotizar en la bolsa y en 1929, de forma amistosa, los hermanos Opel firmaron un acuerdo con General Motors, por el que el fabricante estadounidense adquirió el 80% de las acciones de Adam Opel AG.
El acuerdo permite a Opel tener una completa autonomía para seguir fabricando coches y Wilhelm Opel siguió siendo presidente hasta 1941. Opel es el primer fabricante alemán de automóviles en establecer una compañía de seguros y el «Opel Bank» financia compras de coches y organiza pagos a plazos, siendo también pioneros en ello. En 1937 abandonan la producción de bicicletas a pesar de que seguían teniendo unas buenas ventas. En 1940 tiene lugar la producción del coche Opel un millón pero en octubre una directiva del régimen de Hitler paraliza la producción de coches de pasajeros.
Durante la II Guerra Mundial las plantas alemanas de Opel sirvieron al ejército nazi. La empresa fabricó componentes para bombarderos, tanques y submarinos. Por ello, sus fábricas se convirtieron en un objetivo militar y fueron bombardeadas varias veces, aunque siguiera siendo, teóricamente, propiedad de una empresa estadounidense: General Motors. Hasta 1947 no puede reiniciar la fabricación ya que gran parte de la maquinaria la había confiscado Rusia. En 1956 sacan el vehículo dos millones de la marca. En 1962 sale el Opel Kadett, quizás el más famoso de la marca en el siglo XX, que ayuda a volver a situar a Opel como la marca de mayor cuota en Alemania en 1972 (con un 20% de las ventas), si bien en España el modelo más popular fue el Corsa, fabricado en Figueruelas (Zaragoza), que nació en 1982.
En 2009, en plena resaca de la Gran Recesión, GM empieza a vender las acciones de Opel: la austriaco-canadiense Magna International adquiere el 27,5%, el mismo porcentaje que el banco ruso Sberbank, mientras un 10% es adquirido por los propios trabajadores. Finalmente, desde 2017 pertenece al grupo PSA, que mantiene la marca y que acaba sumando, posteriormente, al grupo Stellantis.