A medida que se van conociendo los detalles del denominado ‘banco malo’, el interés de los inversores internacionales por la adquisición de los activos disminuye. Así, la acogida de los descuentos con los que serán traspasados estos activos, especialmente los relacionados con el sector residencial, ha sido muy fría. Las cifras restan mucho atractivo, sobre todo para los fondos buitre, que estaban especialmente atentos al proceso.
Intermediarios que trabajan para estos vehículos señalaron a Vozpópuli que las cifras presentadas en la tarde del lunes hacen menos atractiva la idea de acudir al banco malo para la compra de activos. De acuerdo con la información facilitada por el subgobernador del Banco de España, Fernando Restoy, los pisos terminados serán traspasados con un descuento del 54% mientras que las promociones en curso presentarán un 63% de descuento y el suelo se traspasará a un precio un 79% inferior.
Pero los fondos buitre buscan algo más. Cuando se han reunido con la gran banca para adquirir carteras de activos inmobiliarios su propuesta se ha basado en lograr descuentos más amplios. Precisamente, ha sido éste el punto discrepante porque las entidades no estaban dispuestas a ceder una cartera de pisos con un descuento superior al 70%. La propuesta de la banca a los fondos buitre se asemejaba a la que presenta el banco malo y fue rechazada.
Otra cuestión es el suelo, donde sí podría existir algún interés por parte de los fondos buitre.
Necesidad de aportar capital
Mientras, el resto de inversores institucionales también considera insuficientes los descuentos aunque están más preocupados por el hecho de que la oferta de activos no llegue en forma de lotes homogéneos, lo que la haría más atractiva, especialmente para fondos especializados en el sector inmobiliario.
Otro de los aspectos que mina el atractivo del banco malo para los inversores internacionales es el hecho de que algunos de los activos precisarán de una aportación adicional de capital para su desarrollo. Es el caso, sobre todo, de los activos de suelo y de las promociones sin finalizar, aunque en este lote también podrían incluirse algunas viviendas terminadas con el fin de poder ponerlas en el mercado en buenas condiciones para la venta.
La participación de inversores institucionales resulta fundamental para que Sareb vaya vaciando su cartera de activos en tanto en cuanto el ritmo de venta no puede compararse al que pueda lograr el banco malo con los particulares que, además, prosiguen condicionados por la falta de crédito por parte de las entidades financieras.