Apple se ha convertido en la primera cotizada del mundo que gana un billón de dólares en bolsa en un mismo año (2023), lo que demuestra lo de moda que está. Pero a pesar de sus aires de modernidad, lo cierto es que está cerca de cumplir medio siglo y a finales del siglo pasado tenía una imagen de marca obsoleta; por lo que se puede hablar de un nacimiento de Apple y de una resurrección posterior, ambas protagonizadas por el mismo personaje: Steve Jobs (1955-2011).
Steve Paul Jobs era un californiano hijo de un emigrante sirio (y musulmán) y una estadounidense de ascendencia alemana y suiza que lo dieron en adopción dada la juventud que ambos tenían. Sus padres adoptivos eran ella ama de casa y él maquinista, y tuvo una hermana (también tuvo uno de sus padres biológicos que conoció ya de mayor). Desde joven se interesó por la electrónica y participó en cursos del Hewlett-Packard Explorer Club, donde empleados de esta empresa mostraron a un Steve Jobs de 12 años la primera computadora que vio en su vida, algo que le marcó. Se mostró tan interesado que al Jobs adolescente le ofrecieron prácticas laborales veraniegas en Hewlett-Packard, donde conoció a Steve Wozniak en 1971.
Nacido en 1950, Wozniak, también californiano y de ascendencia polaca y ucraniana, procedía de una familia con algo más de nivel económico que la de Jobs. Fue expulsado de la universidad de Colorado por piratear su primitivo sistema informático colgando bromas en él. En 1971 ingresa en la Universidad de California y construye su primera computadora con un amigo (Bill Fernández, el mismo que le presentó a Steve Jobs) y la llamó Cream Soda, su bebida favorita.
Ese mismo año Wozniak construyó sus propias “cajas azules”, terminal que permitía hacer llamadas telefónicas, incluso de larga distancia, sin coste. Vendió unas 200 a 150 dólares cada una y repartió el beneficio al 50% con el vendedor, que resultó ser Steve Jobs.
En 1972 la pareja se separa momentáneamente porque Jobs ingresa en la universidad, que abandona a los seis meses, sintiéndose culpable por el alto coste que debía asumir su padre. No obstante, acudió como oyente año y medio más, interesándose, gracias a una de esas clases, por la caligrafía, origen de las tipografías que creó para el Mac y que heredó también Windows. En 1974 entra como técnico en la empresa de videojuegos Atari donde conoce a Ronald Wayne (nacido en 1934), que cofundó Apple en 1976 con Jobs y Wozniak, pero sin dejar su trabajo, ya que no se fiaba del futuro de la empresa.
De hecho, Wayne vendió sus acciones por unos 800 dólares perdiendo con esa decisión miles de millones de dólares. Fue el creador del primer logotipo de la empresa (un dibujo de Newton leyendo un libro sentado bajo un manzano) que apenas duró un año.
Los primeros pasos de Apple
Volviendo a 1975, ese es el año en el que Wozniak (claramente en esa época era el técnico electrónico y Jobs el comercial y creador de conceptos) diseña y desarrolla el Apple I, sin un ánimo comercial, simplemente buscando impresionar a otros aficionados a la informática. Completó el diseño el 1 de marzo de 1976: el hardware, las placas de circuitos y el sistema operativo eran suyos y lo intentó vender a HP y hasta en cinco ocasiones lo rechazaron. Entonces Steve Jobs le convenció de montar un negocio propio para construir y vender las placas de circuito impreso desnudas del Apple I. Para financiarse Wozniak vendió su calculadora científica HP y Jobs su furgoneta Volkswagen. Wayne fue el supervisor administrativo.
El nombre se le ocurrió a Jobs y aunque se dieron muchas teorías. Según sus propias palabras: "fue en parte porque me gustan mucho las manzanas y en parte porque estaba antes que Atari en el listín telefónico” (ya contamos que Jeff Bezos cambió el primer nombre de Amazon -cadabra- por lo mismo). Apple nació el 1 de abril de 1976, una vez más, en un garaje.
Una tienda de computadoras llamada Byte Shop les encargó pronto 50 unidades del Apple I a 500 dólares cada una, pero los pidieron ensamblados, así se convirtieron en empresa de ordenadores. En noviembre un ingeniero de Intel invirtió en la nueva compañía y es entonces cuando Wozniak deja su trabajo en HP. Después del éxito del Apple I, Wozniak diseñó el Apple II, la primera computadora personal con la capacidad de mostrar gráficos en color y un lenguaje de programación BASIC integrado. Y empieza una historia plagada de anécdotas para la que no hay espacio.
El 12 de diciembre de1980 salen a cotizar en la bolsa y ambos pasan a ser millonarios. Pero el Apple III y el Apple Lisa no funcionan bien, y aunque el 24 de enero de 1984 presentan el Macintosh, alabado por los expertos por sus grandes prestaciones y fiabilidad, las ventas decepcionan. Wozniak deja la empresa a comienzos de 1985 (posteriormente vendería casi todas sus acciones) y el 10 de abril de 1985 el consejero delegado John Sculley (elegido por Jobs dos años antes) monta un “golpe de estado” y logra que la junta directiva retire de sus funciones a Steve Jobs, que deja la compañía unas semanas después. Tiene 30 años y funda NeXT Software.
La reinvención del grupo
La decadencia de Apple sin sus fundadores es evidente y a finales de 1996 Apple compra la compañía de Jobs por 400 millones de dólares para atraerle de nuevo. Antes de un año ya es el director. En 2001 lanza al mercado el iPod (proyecto personal. Es conocida la anécdota en la que tira el primer prototipo a un acuario y al ver que de dentro salen burbujas les dice a los ingenieros que si cabe aire entonces sobra espacio y se puede construir más pequeño).
Fue el primero de sus grandes éxitos de esta nueva etapa (cuyo principal símbolo es el iPhone, presentado en 2007) y que convertiría a la vieja Apple en el adalid de la modernidad que es hoy, además de cerrar 2023 como la cotizada con mayor capitalización bursátil del mundo: tres billones de dólares. Ahora le ha superado Microsoft, pero siempre quedará como la primera en alcanzar esa cifra.
