Enagás no ha tardado demasiado en ponerse a la tarea de incrementar su peso en la estadounidense Tallgrass, en la que tomó una participación mayoritaria junto a los fondos Blackrock y GIC. Apenas tres días después de la firma del acuerdo con estas entidades, que tuvo lugar el pasado 11 de marzo, la compañía española comenzó a adquirir pequeños paquetes adicionales de acciones de la empresa norteamericana. De esta forma, Enagás comienza a desarrollar su anunciada estrategia de subir la participación en su nuevo activo.
La operación conjunta con Blackrock y GIC supuso para Enagás una inversión inicial de 590 millones de dólares, que le permite controlar cerca de un 25% de las acciones de Tallgrass que cotizan en la Bolsa de Nueva York (otra parte del capital de la empresa estadounidense no está en el mercado). La empresa española anunció que el acuerdo contempla la opción de adquirir algo más de un 3% adicional, en una primera etapa, y que, además, podría destinar hasta 300 millones de dólares adicionales en comprar más acciones.
De ellos, 100 millones ya han sido aportados al vehículo constituido junto a sus dos socios para controlar el capital de Tallgrass.
De acuerdo con la documentación remitida a la Comisión de Valores de EEUU (SEC, por sus siglas en inglés, el supervisor del mercado estadounidense), Enagás ha adquirido algo más de 280.000 títulos adicionales de Tallgrass, con una inversión cercana a los siete millones de dólares. Las operaciones se han efectuado entre los días 14 y 18 de marzo.
Previsión estratégica
Al día siguiente de la firma del acuerdo, el presidente de Enagás, Antonio Llardén, presentó ante los analistas y posteriormente a los medios de comunicación la estrategia actualizada del operador del sistema gasista español, que ya incluía la compra de Tallgrass. En esta exposición, Llardén explicó los puntos fundamentales del pacto con Blackrock y GIC, entre los que se encontraban la posibilidad de aumentar la participación. Apenas dos días después comenzaron los movimientos en esta dirección.
Las acciones de Tallgrass que cotizan en Wall Street no han dejado de revalorizarse desde que se anunció la compra de una mayoría del capital por parte de Enagás, Blackrock y GIC. Concretamente, el precio de los títulos de la compañía norteamericana ha subido más de un 7% desde entonces.
Además, desde finales del pasado año, Tallgrass ha subido cerca de un 20% en Bolsa, en medio de los rumores que apuntaban a que era objeto de deseo de determinados inversores. Precisamente, Llardén admitió que Enagás llevaba tiempo buscando un activo en EEUU y que uno de sus objetivos era Tallgrass. Aunque en un primer momento Blackrock había tomado la delantera, para la compra de cerca de un 44% del capital (incluidas las acciones cotizadas y las no cotizadas), finalmente fue posible el acuerdo para llevar a cabo la operación de forma conjunta.
En su estrategia actualizada, Enagás prevé recuperar cerca de 300 millones de dólares a través de los dividendos, hasta 2023.
