El Departamento de Comercio, en su ajuste definitivo de cifras, mostró que la contracción, inicialmente calculada en un 1 %, fue resultado de la debilidad del consumo, auténtico motor de la economía de EE.UU. y que equivale a más de dos tercios del producto interior bruto (PIB). La mayoría de los expertos esperaba que el ajuste de cifras mostrara una reducción anualizada del 2 %.
Uno de los factores de esta disminución fue que la reducción de los gastos en el cuidado de la salud, cuando el Gobierno había presumido que la puesta en marcha de la reforma del sistema sanitario aumentaría el gasto en ese capítulo entre enero y marzo.
Ese período del año estuvo marcado, además, por repetidas tormentas de nieve y temperaturas extraordinariamente bajas que paralizaron las actividades en la mayor parte del país.
La actividad económica de EE.UU. creció a un ritmo anual del 1,1 % en el primer trimestre de 2013, del 2,5 % en el segundo, se aceleró a un ritmo del 4,1 % en el tercero y volvió a moderarse en el último trimestre del año con un 2,6 %.
Los expertos han calculado que entre abril y junio el PIB podría haber marcado un ritmo anual de crecimiento del 3,6 %.
El informe de hoy muestra que la inversión residencial, que incluye el gasto en la construcción y remodelación de viviendas y las comisiones de los vendedores, disminuyó a un ritmo del 4,2 % en el primer trimestre, comparado con un cálculo preliminar del 5 %.
En la balanza del comercio exterior, otro factor importante en el cálculo del PIB, las exportaciones entre enero y marzo disminuyeron a un ritmo anual del 8,9 %, frente al cálculo preliminar del 6 %.
Previsiones para los próximos años
Tras su reunión de la semana pasada, la Reserva Federal presentó unos pronósticos de crecimiento para este año ligeramente inferiores a los adelantados en marzo, con un mínimo avance del PIB del 2,1 %, una remontada en 2015 hasta el 3 % y un 2,5 % para 2016.
Pero el bajón fue tan notable entre enero y marzo que, probablemente, la primera mitad del año vea un ritmo anual de crecimiento por debajo del promedio de 2 % marcado desde que terminó la Gran Recesión, en julio de 2009.