El Fondo Monetario Internacional (FMI) ha alertado este miércoles de la "precaria" previsión económica de la eurozona debido a los riesgos de las tensiones comerciales a nivel global, a la "alta" posibilidad de que se produzca un brexit sin acuerdo y a que los países endeudados no han creado colchones fiscales ni terminado de implementar reformas estructurales.
Según recogen las conclusiones preliminares del informe anual que realiza la institución financiera, el conocido como 'Artículo IV', el crecimiento del club de países que comparten el euro se ha "ralentizado" y la evolución de la inflación "sigue decepcionando".
En este sentido, el organismo presidido por Christine Lagarde ha asegurado que el crecimiento debería recuperarse en lo que queda de año, pese a que la inflación necesitará "más tiempo" para recuperar una senda estable de crecimiento. La expansión económica repuntará durante este ejercicio por la "continua" y "robusta" demanda doméstica, por la recuperación global y por las acomodación monetaria llevada a cabo por el Banco Central Europeo (BCE).
"Poco progreso"
El FMI también ha alertado de que se ha hecho "poco progreso" para reducir los desequilibrios observados en la eurozona. Por este motivo, el organismo ha subrayado que es necesario que los Estados pertenecientes a la zona euro cumplan con las reglas impuestas desde Bruselas.
"A pesar del fuerte crecimiento en los últimos años, los países con deuda elevada no se han consolidado lo suficiente y, en algunos casos, incluso han relajado su política fiscal. Sin embargo, estas desviaciones se han encontrado con una aplicación legislativa indulgente, debilitando los incentivos de los países para respetar las normas y dificultando que las instituciones de la Unión Europea reaccionen de manera creíble ante nuevas violaciones de las reglas", ha alertado el FMI.
La semana pasada, la Comisión Europea activó el procedimiento para sancionar a Italia por su elevada deuda pública, que supera el 130% del producto interior bruto (PIB), aunque Bruselas ha iniciado una etapa de diálogo con las autoridades italianas para evitar este paso.
Colchones fiscales y reformas estructurales
De esta forma, la institución radicada en Londres ha especificado que aquellos países con "limitado espacio fiscal" deberían priorizar la sostenibilidad de la deuda con el objetivo de construir "colchones fiscales" que puedan usar en caso de que el pronóstico de crecimiento empeore de forma significativa.
Entre las conclusiones a las que ha llegado el FMI también está la implementación de reformas estructurales para mejorar la productividad de aquellos países donde es reducida. Estos cambios legislativos harán a esas economías "más resilientes" reduciendo la profundidad y la duración de la próxima eventual recesión.
En lo que respecta al sector financiero, el equipo de Lagarde ha recomendado a los reguladores impulsar la consolidación del sector bancario ya que, aunque han incrementado sus colchones de capital y han hecho progresos reduciendo sus préstamos dudosos, la baja rentabilidad "sigue siendo una preocupación generalizada". A este respecto, el FMI ha recomendado que se diversifiquen aún más los ingresos, incluso mediante las fusiones y adquisiciones transfronterizas.
"La zona euro necesita un mercado bancario que realmente no tenga fronteras", ha apostillado el organismo.