Abaco Capital Investments es una eafi que ya se ha registrado como gestora de inversión colectiva (Sociedad Gestora de Instituciones de Inversión Colectiva, SGIIC). Así consta en los registros mercantiles y así lo confirman en la entidad, aunque todavía queda pendiente que la CNMV lo verifique en sus propios registros. El movimiento es uno más dentro de un proceso de cierta revitalización de la industria financiera independiente española, al que la crisis dejó en un papel casi testimonial.
Esta sociedad quiere gestionar de manera directa 5 sicavs y dos fondos de inversión, uno de Renta Variable y otro de Renta Fija Mixta. La sicav más conocida que hasta la fecha asesora Abaco es Arenberg, que está bajo el ‘paraguas’ de UBS. Arenberg está en las carteras de fondos selectos, como el Smart-ish de Abante o el Banco Madrid Sicav Selección, que buscan tomar posiciones en las mejores sicavs y fondos de autor.
Abaco está fundada por Pablo González, ejecutivo con larga trayectoria en mercados, con experiencia en firmas como Santander, Credy Lyonnaisse, Nomura o el hedge fund Refco. Es consejero de Casa Grande de Cartagena, el family office de la familia Del Pino. Le acompañan otros profesionales como José Costales o Carlos Neira.
Abrirse paso
Cada vez son más las firmas independientes que intentan abrirse paso en la industria española. En muchos casos se trata de ejecutivos de grandes firmas que han dejado sus casas de origen, emprendiendo proyectos particulares, a partir de una sicav abierta o una eafi.
El mensaje es muy claro: el cliente que invierta con ellos sabe que lo hace en un instrumento en el que también está el patrimonio personal de los gestores, por lo que correrán la misma suerte tanto los inversores como los promotores. Algo que no ocurre en grandes firmas que a su vez controlan las enormes redes de distribución y en las que prima la necesidad de la matriz, antes que el interés del propio cliente.
Así, le venden el producto que más margen deja, pero seguramente no el que más conviene al inversor. Con las eafi y las boutiques independientes no existe este conflicto de intereses.
Sin embargo, muchas de estas eafis y boutiques quieren protagonizar un upgrade y convertirse en gestoras. Un movimiento al que se sumarán más en los próximos tiempos y que promete revitalizar la industria español de gestión.
