Banco Espirito Santo (BES) mantiene su apuesta decidida por el crecimiento orgánico, en un entorno como el actual, en el que comienzan a escasear las oportunidades de adquisiciones. El grupo portugués en España está a punto de abrir oficinas en Murcia y Vitoria y continúa su ritmo de aperturas, que contempla llegar a medio largo plazo a las 80-100, de manera que habrá “una oficina en cada provincia”, según palabras de su consejero delegado, Pedro Escudero.
Esta cifra supone más o menos duplicar los objetivos anunciados el pasado ejercicio, cuando anunció inauguraciones como Logroño o Palma de Mallorca.
BES finalizó el pasado año con 30 sucursales y calcula finalizar este ejercicio con 40. De momento, van 33, con las recientes aperturas de Madrid (en la confluencia de las calles Serrano y Príncipe de Vergara esta misma semana) y Orense. En breve, Murcia y Vitoria.
La entidad quiere llegar a medio plazo al entorno de las 100. Escudero pondera, además del crecimiento, la mejora del negocio en general: “hace unos años, sólo teníamos 9 de 25 oficinas por encima de los 100 millones de euros bajo gestión (umbral de rentabilidad exigido). Hoy tenemos 23”.
Desde el banco insisten en poner de manifiesto que, además de aperturas, están remodelando otras delegaciones, como Pamplona, Granada, León o Gijón.
Muchos fichajes
En el capítulo de plantilla, BES fichó el pasado año a 25 banqueros, hasta un total de 160 y pretende repetir esa cifra de incorporaciones en este ejercicio. La plantilla total de la entidad supera por poco las 500 personas, de la que el 65% son comerciales, y, además de los banqueros privados, hay otros 60 dedicados a la banca de empresas.
“Estamos incrementando los costes de personal a un ritmo del 10% anual y pretendemos seguir así. Nos produce orgullo poder decir que, además de crecer, creamos empleo”, afirma Escudero.
Estos planes de crecimiento orgánico están comprendidos dentro de una estrategia con un vencimiento cercano. En 2015, el grupo quiere estar en los 15.000 millones bajo gestión (ahora mismo tiene unos 12.000) y disponer ya de 40 oficinas. Pero cuanto más cerca se esté de esas 80-100 oficinas, mejor.
En los últimos 4 años, BES ha multiplicado por cuatro la cifra de clientes y ha doblado la cifra de negocio.
Ahora mismo, de esos 12.000 millones aproximados, 4.000 están en el negocio de empresa y 8.000 en banca privada. De esta última partida, un 40%-45% está en depósitos, otro 20% en créditos y el resto en gestión, es decir, carteras discrecionales, fondos de inversión y sicavs.
Boom de sicavs
La entidad reconoce que hay ahora mismo un boom de sicavs y que de momento ya tienen 10 mandatadas para este año. La gestora maneja alrededor de 3.000 millones de euros entre fondos y sicavs.
BES es célebre por su agresiva campaña de captación de depósitos, con Cristiano Ronaldo como imagen, con los que el año pasado se hizo con 1.500 millones, a un tipo medio del 3,3%-3,4% (empezó el ejercicio por encima del 4,6% y acabó por debajo del 3%).
La entidad ahora mismo tiene su stock de depósitos en el 2,60% medio y ofrece cuentas nuevas a un tipo que ronda el 2%, “unos 40-50 puntos básicos por encima de lo que dan las principales entidades españolas”, aclara Escudero quien, sin embargo, afirma que prevé una salida desde las cuentas a otros activos de gestión.
En definitiva, el mensaje es claro: crecimiento orgánico, pese a que Espirito Santo ha estado siempre relacionado con operaciones corporativas. En su día compró Benito y Monjardín y recientemente la gestora del Banco Pastor, que tuvo que vender por incompatibilidad comercial con Banco Popular.
Con esta última operación semi frustrada, BES obtuvo una plusvalía, pero le quedó mal sabor de boca. Ahora, habla con poco entusiasmo inicialmente sobre cualquier deal. Algo parecido acaba de ocurrir con la gestora de Catalunya Banc, cuyo mandato de venta ha sido anulado ante la incertidumbre que suscita la venta futura de la matriz.