El precio de la vivienda inició el año con un caída del 7,2% en enero, con lo que acumula ya un descenso del 40% frente a los valores máximos alcanzados antes del estallido de la burbuja en diciembre de 2007, según el Índice de Mercados Inmobiliarios Españoles (Imie) de la tasadora Tinsa.
La nota de Tinsa destaca que la caída de enero supone una moderación frente al descenso de un año antes, cuando disminuyó un 13,8% y añade que, salvo excepciones (junio y diciembre), las bajadas se fueron moderando mes a mes a lo largo de todo 2013 hasta alcanzar la cifra actual. No obstante, esta bajada constante ha llevado al índice a situarse en 1.371 puntos a principios de 2014, valor idéntico al que obtuvo en agosto de 2003, hace más de una década.
El recorte acumulado desde que el valor de las viviendas alcanzó el máximo en diciembre de 2007 llega ya al 40%.
Por zonas, las viviendas de las áreas metropolitanas fueron las que mayor abaratamiento experimentaron en enero de este año con un 8,5%, seguidas de las de la capitales y grandes ciudades con una rebaja del 8,4% sobre el mismo mes del año anterior. Por su parte, los inmuebles de Baleares y Canarias cayeron un 6,9%, mientras que los ubicados en otros municipios bajaron un 6,3% y los de la costa Mediterránea, un 4,8%.
En cuanto a los recortes acumulados por zonas desde que éstas alcanzaron su valor más alto, la costa Mediterránea situó su ajuste en enero en el 45,8%; le siguieron las capitales y grandes ciudades con el 43,3% y las áreas metropolitanas, que acumularon un descenso del 43%.
