Todo apuntaba, mediado el ejercicio 2019, que la producción de turismos en las fábricas españolas sufriría un retroceso al terminar el año, a pesar incluso de los buenos meses finales registrados. Sin embargo, un fuerte mes de diciembre ha permitido finalmente cerrar en positivo. Muy tenue, pero positivo al fin y al cabo.
Y es que la producción en las plantas españolas creció un 0,1% en 2019, hasta 2.822.360 unidades (2.795 más que en 2018), y la previsión para este año apunta a un crecimiento moderado, rozando los 3 millones de unidades, según ha informado la patronal de fabricantes, Anfac. El dato del año pasado quiebra una secuencia de dos ejercicios consecutivos de descensos en cuanto a la producción en las fábricas, ya que 2018 cerró con una caída del 1% y 2017 con un 1,5% menos. La previsión para 2020 se fundamenta en las nuevas adjudicaciones de modelos y versiones anunciadas durante el pasado año.
La producción de vehículos en diciembre resultó clave para cerrar el año ligeramente en positivo, ya que se incrementó un 21,2% en comparación con el mismo mes de 2018, hasta 177.427 vehículos. España se mantiene como el segundo productor europeo por detrás de Alemania (más de 5,6 millones de vehículos) y por delante de Francia (unos 2,3 millones).
Para Anfac, el dato de cierre de 2019 "demuestra la confianza" que los fabricantes tienen en el tejido industrial automovilístico español
La fabricación de turismos, que es el segmento que supone el grueso de los vehículos que se fabrican en España, concluyó 2019 con 2.209.497 unidades, lo que supone un descenso del 0,3% en tasa interanual. Esta caída se ha compensado con la fabricación de los vehículos comerciales ligeros asignados en 2018 y 2019, ya que este segmento creció un 12,3% el año pasado, sumado al repunte del 7,7% de los vehículos industriales pesados.
Para Anfac, el dato de cierre de 2019 "demuestra la confianza" que los fabricantes tienen en el tejido industrial automovilístico español, "asignando vehículos de gran éxito comercial". Añade que la producción española en 2019 contrasta con la de otros países productores europeos, como Alemania, Reino Unido o Italia, que han sufrido importantes descensos.
Crecen también las exportaciones
En cuanto a las exportaciones, de las fábricas españolas salieron un 0,2% más de vehículos con destino a otros países en 2019, hasta 2.310.070 unidades, y solo en diciembre se exportaron 145.418 vehículos, un 20% más que el mismo mes de 2018. Este crecimiento se debe, según Anfac, a la recuperación de los principales destinos en Europa.
Así, Alemania ha incrementado sus compras de automóviles españoles un 12,5%, mientras que Reino Unido ha aumentado sus pedidos un 13,6%, a pesar de la caída de su mercado interno (2,4 %). Italia ha adquirido un 1,7% más de vehículo español y Francia ha mantenido sus compras en un nivel similar al del año pasado. Estos cuatro mercados suman casi el 65% de las exportaciones totales.
Por fábricas y según los datos de la Asociación de Fabricantes de Europa (ACEA), la planta de Seat en Martorell (Barcelona) acabó el año pasado como la de mayor vehículos producidos, con algo más de medio millón de coches, su cifra más elevada desde 2000 y un 5,4% más que en 2018. La segunda factoría por volumen ha sido la de PSA en Figueruelas (Zaragoza), con 470.371 coches y un incremento en tasa interanual del 5,1%.
Sernauto pide la ayuda del Gobierno
Ante los datos de producción, la Asociación Española de Proveedores de Automoción (Sernauto) ha solicitado al Gobierno trabajar conjuntamente en la estrategia-país necesaria para mantener los niveles de competitividad y empleo alcanzados por la industria de automoción. Como explica el Director General de esta patronal, José Portilla, “aunque son cifras positivas, la industria española de automoción está experimentando una cierta ralentización con respecto a los incrementos de los últimos años. De ahí que, de cara a 2020, donde las previsiones son de crecimiento plano o moderado, resulte clave el apoyo firme del Gobierno para poner en marcha medidas que nos permitan seguir atrayendo modelos a nuestro país y generando empleo de calidad como el que ahora tenemos”.
En este sentido, continúa, “son imprescindibles medidas que apoyen el esfuerzo de inversión en I+D+i que están realizando nuestras empresas, en su mayoría pymes, para poner en el mercado sistemas, tecnologías y componentes tecnológicamente avanzados y que hacen que los vehículos sean cada vez más seguros, eficientes, conectados y automatizados”.
Las fabricas de componentes en España cuentan con un ecosistema de proveedores innovador, sólido y competitivo, que da empleo a más de 370.000 personas directa e indirectamente y que es referencia en todo el mundo. Sernauto busca garantizar los altos niveles alcanzados y que la transición tecnológica e industrial en la que se encuentra inmerso el sector no deje a nadie atrás.
