Los Técnicos del Ministerio de Hacienda (GESTHA) han informado que las denuncias por delito fiscal cayeron un 33,7% en 2016 (hasta las 226), año en el que a su vez se tramitaron un 46% menos de expedientes que en el año 2015. Un desplome de las denuncias que no obedecería a una caída de los delitos, según afirman desde GESTHA, recordando que la caída de las denuncias ha coincidido con escándalos como de los Papeles de Panamá o el de 'Football Leaks', por lo que, subrayan, podría decirse que los casos de fraude "más que reducirse han ido en aumento".
Los técnicos atribuyen la disminución de las denuncias a la limitación de sus competencias en la lucha contra el fraude, que les impide completar la investigación sobre los delitos, simulaciones, conflictos o fraudes de ley que descubren; la orden de la AEAT (Agencia Estatal de Administración Tributaria) de realizar básicamente investigaciones parciales; la amnistía fiscal de 2012, ya anulada por el Tribunal Constitucional; y la modificación del artículo 305 del Código Penal.
Según el colectivo, estas cuatro causas complican el descubrimiento de fraudes superiores a los 120.000 euros, cantidad a partir de la cual se configura el delito fiscal.
Medidas para combatir el fraude
En este contexto, Gestha reitera la necesidad inaplazable de un plan de lucha contra el fraude fiscal realista y eficiente, con el que, según sus estimaciones, se podrían recaudar a medio plazo hasta 40.000 millones.
Entre las principales medidas que podrían lograr mitigar las cifras actuales de fraude y evasión, los técnicos destacan la reorganización del Ministerio de Hacienda, de la Intervención General de la Administración del Estado (IGAE) y de la Agencia Tributaria con estructuras más horizontales y una capacidad de decisión más compartida.
También proponen el aumento de las responsabilidades de la plantilla con exigencia de su cumplimiento, así como la dotación de más medios a la AEAT, ya que actualmente sólo tiene un empleado por cada 1.928 contribuyentes, frente a países como Francia, donde hay uno para menos de la mitad de ciudadanos (860).
