El Gobierno ha presentado este jueves un Plan de Impulso al Sector Turístico por valor de 4.262 millones de euros y basado en avales para nuevas líneas de financiación, en la mejora de la competitividad con programas de formación y 'mentoring' y en la promoción de los destinos a través de campañas de marketing. Sin embargo, el citado plan no contempla ayudas o subvenciones a los españoles para incentivar la demanda turística en España, como reclamaba el sector.
Esta medida ha sido aplicada ya en algunos países europeos donde el turismo también tiene un peso clave, como Italia. El Ejecutivo de Giuseppe Conte ha destinado 4.000 millones a reparar el sector con, entre otras medidas, la concesión de bonos de 500 euros a las familias con ingresos inferiores a los 40.000 euros anuales para gastar hasta final de año en hoteles y albergues de Italia.
Para impulsar la cadena de valor de la automoción, España sí se ha comprometido a subvencionar con 250 millones de euros la compra de nuevos vehículos. Los españoles podrán adquirir cualquier automóvil -gasolina, diésel, híbrido o eléctrico- con ayudas de entre 400 y 4.000 euros siempre y cuando se entregue un utilitario de más de diez años de antigüedad y el nuevo valga menos de 35.000 euros (o 45.000 si son personas con movilidad reducida o coches cero emisiones).
La automoción y el turismo son dos sectores claves para la economía española, con un peso en el PIB del 10% y el 13%, respectivamente. En este sentido, el turismo esperaba que el Gobierno adoptara una medida similar para motivar las vacaciones de los nacionales, generando ingresos en toda la cadena -transporte, hoteles, bares, restaurantes, etc.), pero, según lo anunciado, sólo lo hará a través de campañas de 'branding' y promoción.
Hostelería de España -organización que incluye a más de 270.000 restaurantes, bares, cafeterías y pubs de todo el país- "agradece el esfuerzo del Ejecutivo en la campaña de comunicación y publicidad para fomentar el turismo nacional", pero asegura que "la economía de los españoles se ha visto gravemente dañada con esta crisis y, sin ayudas económicas, el nivel de reactivación no va a ser suficiente".
El 65% de los españoles no irá de vacaciones
Según el último barómetro del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) publicado este miércoles, el 65,7% de los españoles no tiene pensado ir de vacaciones este verano. El sondeo, cuyo trabajo de campo se hizo entre el 1 y el 9 de junio, señala que a un 40,8% de los ciudadanos lo que más le preocupa del coronavirus son los efectos sobre la salud, frente a un 34% que apunta a los económicos, aunque un 24,9% admite que ambos aspectos le inquietan por igual.
"Necesitamos planes de incentivo como han hecho otros países europeos, subvenciones a empresas y bonos turísticos para gastar en hostelería. Sin incentivos no vamos a poder reactivar el sector", señalan desde la patronal de la hostelería. En la necesidad de "medidas para incentivar a corto plazo el consumo turístico interno" coincide Exceltur, asociación que representa a todo el sector (hoteles, aerolíneas, agencias de viajes, etc.). "Faltan medidas similares a las del automóvil o a la de otros países como Italia", comenta en un comunicado.
En su reacción al plan del Gobierno, la Asociación Empresarial Hostelera de Benidorm, Costa Blanca y Comunidad Valenciana (HOSBEC) critica que "no mencione ni una sola medida que favorezca el consumo turístico". "No hay ningún estímulo para el turismo interno como han hecho otros países. El mismo Gobierno que sí apoya al automóvil con descuentos para la compra de nuevos vehículos, no estima necesario que los españoles puedan verse invitados también a reactivar el turismo español", añade.
En el plan presentado por el Ejecutivo, recuerda que el 13 de mayo la Comisión Europea (CE) publicó una comunicación sobre turismo y transporte para ayudar a los Estados miembros en la que, entre otras medidas, abordaba "las estrategias globales de recuperación para las regiones más afectadas y la promoción del turismo local a través, por ejemplo, de bonos de patrocinio". Sin embargo, de momento, esta última opción no ha sido la elegida por España para potenciar la industria turística.