El Gobierno de España no renovará su contrato con la agencia de calificación S&P Global Ratings para la evaluación de la deuda soberana española. A partir de ahora, solo trabajará con la agencia canadiense DBRS. El año pasado ya se prescindió de los acuerdos con Fitch y Moody’s.
El ministro de Economía, Industria y Competitividad, Luis de Guindos, ha asegurado que es “normal” que España no renueve su contrato con la agencia. “Creo que estamos entrando en una fase de normalización de las relaciones del Tesoro español con los inversores internacionales” afirmó en una rueda de prensa tras la reunión de ministros de Economía y Finanzas de la UE (Ecofin).
"Todas las agencias de rating van a valorar la deuda española y de algún modo esto no es un tema de ahorro de costes, es que la deuda española es tan relevante que lógicamente no necesita pagar a ninguna agencia de rating" aseguró el ministro. Desde Economía también indicaron que el acuerdo con la agencia “no es necesario” dado “el clima de confianza que existe en la actualidad en la economía española”.
De Guindos también señaló que el Gobierno sigue con esta decisión la pauta de otros países con respecto a las agencias de calificación: "Miren lo que pasa en países de nuestro entorno, en Alemania, en Francia, y la verdad es que no hay contratos del Tesoro con las agencias de rating".
Los ‘ratings no solicitados’ para España
Sin embargo, S&P Global seguirá ofreciendo sus notas sobre la deuda soberana española en forma de “rating no solicitado”. “Seguiremos calificando a España porque creemos que contamos con acceso a suficiente información pública de calidad confiable para respaldar nuestro análisis y porque creemos que existe un significativo interés del mercado en este rating no solicitado", indicó la agencia.
Desde el Ministerio explicaron que las agencias siguen emitiendo su opinión “aunque no estén contratadas a tal efecto”. De hecho, la agencia Fitch publicó recientemente su evaluación del rating a largo plazo de España, que elevó a 'A-' con perspectiva estable desde 'BBB+', siendo ésta la evaluación más alta desde 2012.
La calificación de S&P Global Ratings para España es de 'BBB+', con perspectiva positiva. La agencia tiene previsto evaluar la nota española por primera vez el próximo 23 de marzo, y hará una segunda valoración el 21 de septiembre.
Moody’s, por su parte, otorga una calificación de 'Baa2/Estable', y realizará las revisiones del rating el 13 de abril y el 5 de octubre. DBRS, que aún conserva su contrato con el Gobierno, asigna a la deuda española una calificación 'A baja' estable. Sus fechas para las revisiones son el 6 de abril y el 28 de septiembre.