Google te escucha por el micrófono del móvil. Sabe por dónde te mueves. Qué te gusta. Cuánto mides. Tu edad, tus gustos, tus preferencias, el color de tus ojos y de tu pelo. Sabe si tienes hijos y si tus padres viven. Facebook, más de lo mismo. Incluso, analiza los rostros de sus usuarios a través de la cámara.
"Saben todo de nosotros". Más que una frase, es un mantra que se repite cada cierto tiempo cuando Google, Facebook o cualquier otro servicio o red social sale a escena. Los sucesos en torno a Facebook, con Cambridge Analtytica como máximo exponente, tampoco han ayudado demasiado a sofocar la histeria de algunos en torno al tema.
La realidad es otra. No hay casos de mala utilización de los datos de un usuario por parte de las empresas citadas -harina de otro costal son los ciberataques o casos que involucran a otros actores-, como el de Cambridge Analytica, en la que fue un tercero quien vendió los datos de 50 millones de usuarios de la red social de Mark Zuckerberg a una empresa para que con esa información influyese en los votos de las elecciones que finalmente ganó Donald Trump.
1.500 millones de usuarios usan Google, mientras su buscador recibe trillones de preguntas al año. Facebook cuenta con 2.300 millones de usuarios al mes, mientras que 1.500 millones de personas consultan todos los días la red social. El pago de servicios con datos compensa
En Europa el Reglamento General de Protección de Datos (RGPD) protege al usuario de lo que se haga con su su información. Es una normativa para regular mejor el nuevo mundo de los datos. La lupa se sitúa muy cerca de este tipo de empresas. Francia multó hace una semana a Google por falta de transparencia con 50 millones de euros.
La RGPD estipula que el usuario debe ser informado de lo que se hace con sus datos de forma clara y concisa. El equivalente a la Agencia Española de Protección de Datos (AEPD) sancionó al gigante de internet porque consideró que no era diáfano en este tipo de explicaciones dentro de su Política de Privacidad.
"La multa se impone para que haya más claridad de lo que se hace con los datos del usuario, pero Google no hace ningún tratamiento de los mismos no permitido por la RGPD. Es decir, se sanciona por no informar debidamente, no por un tratamiento ilícito de los datos. Cuesta encontrar un suceso así en Google", asegura Sergio Carrasco Mayans, abogado especializado en nuevas tecnologías de Faseconsulting.
Anuncios
La información recopilada tanto por Google como por Facebook de sus usuarios se centra casi exclusivamente en ofrecer la posibilidad de que las empresas muestren anuncios. Si miran a su alrededor y preguntan, verán que es complicado encontrar a alguien que haya tenido algún problema más allá del bombardeo publicitario.
Si se tiene en cuenta que ambos servicios son gratuitos, no parece que la publicidad, que además se suele orientar a los gustos de cada persona, sea un problema. Es un trueque, el de datos por servicio, razonable a tenor de los usuarios de ambas compañías. Las cifras de usuarios hablan por sí solas. Más de 1.500 millones de usuarios de todo el mundo utilizan Google, mientras su buscador recibe trillones de preguntas al año. Facebook cuenta con 2.300 millones de usuarios al mes, mientras que 1.500 millones de personas consultan todos los días la red social, con un ritmo de crecimiento anual en ambos casos del 9%. El pago de servicios con datos parece compensar a tenor de las cifras.
"Utilizamos los datos para mostrarle anuncios relevantes, razón por la cual podemos hacer que nuestros servicios sean gratuitos para todos. Pero esto no significa que vendamos su información personal. Además, el usuario tiene el control sobre sus datos, puede optar por bloquearlos en cualquier momento", explican desde Google. Para simplificar la gestión de los mismos, la compañía cuenta con un centro de datos en el que el usuario puede informarse sobre lo que se hace con ellos, y retirarlos de circulación.
Tanto Google como Facebook disponen de centros para gestionar quién puede ver nuestros datos y especificar lo que deseamos hacer con ellos
Algo similar a lo que ofrece Facebook. La red social permite controlar en cualquier momento la información que comparten y con quién, a través de de la configuración de privacidad. Se puede revisar quién ve nuestras publicaciones y la información del perfil. Para ello se debe hacer clic en el interrogante de la parte superior de cualquier página de Facebook y seleccionar comprobación rápida de la configuración de privacidad.
Así las cosas, para Enrique Dans, profesor de Sistemas de Información en el Instituto de Empresa, hay que diferenciar entre Google y Facebook. "Son dos compañías enormemente distintas. Google atesora un montón de datos de ti, de lo que cuentas en tu correo, de lo que buscas, de lo que haces en internet. Sus servicios que están muy bien hechos. Recopilan datos pero jamás los venden a nadie y el tratamiento de los mismos es agregado, sin dar datos específicos. Facebook sí permite que una tercera aplicación tenga tus datos y los comparta. Son especies muy distintas. En Google hay ética y Facebook carece de cualquier modelo ético. Facebook es prescindible pero sin Google no podemos vivir", asegura Dans.