Los impuestos medioambientales van consolidándose como una factura más para los hogares españoles. Se trata de cargas fiscales que tenían un peso relativamente bajo, pero que van ganando protagonismo en los presupuestos familiares. La factura de esos impuestos 'verdes' supone ya una media de 507 euros por cada hogar en nuestro país.
La cifra se extrae de la estadística difundida este lunes por el INE. Se trata del avance correspondiente a 2023, que recoge las cantidades que abonaron empresas y familias por estas cargas. En concreto, según el instituto, los impuestos ambientales alcanzaron los 22.880 millones de euros en 2023. La cifra total encierra un fuerte incremento respecto al año anterior, del 10,7%. Esta tendencia hace que las 'tasas verdes' sigan ganando peso en el mapa fiscal español: ya suponen el 6,5% de los impuestos que se abonan en de España, tres décimas más que en 2022 (6,2%).
La factura que pagan las familias como consumidores finales roza los 9.800 millones. La división por el número de hogares permite hacer una aproximación de lo que aporta cada unidad familiar. Según el INE, al finalizar 2023 había 19,3 millones de hogares en nuestro país, lo que eleva la factura anual por encima de los 500 euros anuales. Los hogares pagaron el 42,8% del total de los impuestos ambientales. Por tipología, abonaron el 72,7% de los referentes al transporte y el 42,0% de los impuestos sobre la energía.
Los impuestos ambientales se agrupan en tres categorías: los que se aplican a la energía (que en 2023 representaron el 77,5% del total), los referentes al transporte (13,7%) y aquellos que gravan la contaminación y los recursos (8,8%). Son estos últimos los que han experimentado la mayor subida. Entre 2022 y 2023 aumentaron un 87,7%, muy lejos de del 7% y del 3,5% que experimentaron los impuestos sobre la energía y el transporte, respectivamente.
La entrada en vigor del Impuesto Especial sobre los envases de plástico no reutilizables provocó una escalada récord de la recaudación obtenida de los productos. Hacienda se embolsó por esta vía 596 millones de euros en 2023, multiplicando casi por seis los 104 millones del año anterior.
Coste para las empresas
El 57,2% restante corrió a cargo de las empresas, que pagaron el 96% de las cargas fiscales sobre la contaminación y los recursos, y el 58,0% de las aplicadas a la energía. Las ramas de actividad que pagaron más impuestos ambientales en 2023 fueron la industria manufacturera (20,4% del total), y transporte y almacenamiento (14,6%). Por el contrario, las que menos abonaron fueron industrias extractivas, y la agricultura, ganadería, selvicultura y pesca (con el 0,5% y 1,0% del total, respectivamente).
El INE aporta otros detalles. Según la clasificación del sistema de cuentas nacionales, los impuestos sobre los productos -excluidos el IVA y los impuestos sobre las importaciones- superaron los 16.000 millones de euros en 2023, un 6,6% más que en el año anterior. Por su parte, otros impuestos aplicados a la producción alcanzaron los 5.000 millones (un 32,8% más que en 2022), mientras que el resto de impuestos corrientes ambientales se situaron en 1.816 millones (un 1,0% menos).