No todas las opiniones que circulan por Europa sobre la economía española son negativas. En un informe publicado este miércoles, Citi aconseja invertir en algunos valores del Ibex 35 y los compara con otras cotizadas del DAX alemán. Las compañías elegidas son Inditex, que ya ha igualado a Santander en capitalización, e Iberdrola. Enfrente, las alemanas Henkel, E.On y RWE.
En las últimas semanas, ha aumentado en Europa el miedo a la crisis de deuda soberana, los riesgos políticos en Francia y Holanda se han disparado y “es importante recordar que no hay milagros para resolver rápidamente la crisis política”, señala Citi. A este entorno se suma el comportamiento del Ibex 35, que en las últimas semanas ha perdido un 20%, retrocediendo a mínimos de 2009.
El informe señala un “ajuste fuerte” en la valoración de las cotizadas españolas por primera vez en dos o tres años, precio al que ve “oportunidades” y un “margen de caída limitado”, razón por la que recomienda invertir en valores españoles. “Los precios de las acciones alemanas y españolas se han movido en direcciones opuestas”, explica el texto, ya que el DAX ha seguido una tendencia contraria a la del selectivo español.
Salir del DAX para invertir en el Ibex
En el texto, Citi hace tres comparativas: Inditex frente a E.On, Inditex frente a Henkel e Iberdrola frente a RWE. La preferencia de los analistas hacia Inditex se basa en su expansión internacional, reflejada en sus aperturas de tiendas en Asia y otros mercados emergentes, y en la previsión de que la evolución de su cotización será positiva durante los próximos años, convirtiéndose en una alternativa estable.
Por el contrario, E.On cuenta con una desventaja en cuanto a las regulaciones en las políticas energéticas, la falta de una resolución en los contratos de gas y la presión en la limpieza de los diferenciales oscuros.
La empresa de Amancio Ortega también se enfrenta en el análisis a Henkel. Ambas son empresas dedicadas a producir bienes de consumo que ofrecen un crecimiento bastante bueno de cara a los inversores. Sin embargo, Inditex ha tenido un desarrollo inferior al de Henkel durante los últimos meses.
La última comparativa enfrenta a dos empresas energéticas: Iberdrola y RWE. Citi alerta sobre la alemana, que presenta desventajas tales como un balance sobrecargado y un bajo crecimiento de las ganancias a medio plazo.
En cuanto a Iberdrola, destaca el crecimiento de su división de renovables. En el lado negativo estarían una demanda de electricidad por debajo de lo esperado en España a un precio también inferior a lo esperado, una caída del coste de producción que afectaría a la división del Reino Unido, problemas derivados de la integración de Energy East y retrasos en la titulización del déficit de tarifa.
No mejora la confianza en la economía española
A pesar de la recomendación de invertir en valores del Ibex, el informe insiste en su preferencia sobre Europa del Norte frente a Europa del Sur. “No estamos diciendo que la economía española haya dado un vuelco”, explica.
El informe de Citi incluye también tres posibles previsiones para la situación económica de España. La primera contempla un escenario negativo con “malas noticias”, en el que aumentaría la presión sobre la banca española y el mercado de deuda. En este futuro habría un riesgo de contagio para el resto de Europa y el panorama sería negativo para los valores en general.
La segunda previsión de los analistas es optimista. Se basa en una mejora de los indicadores económicos, un aumento de la confianza en la banca española y un mayor apoyo de los socios europeos y las instituciones internacionales. Esta situación sería positiva a corto plazo para el precio de las acciones españolas.
La tercera, y con más posibilidades de cumplirse que las otras dos, es la que el informe califica como “salir del paso”. En este caso, veríamos esfuerzos acelerados de los políticos españoles, la banca y el Banco de España para demostrar su determinación y compromiso con el miedo hacia el presupuesto y la debilidad del sistema bancario de fondo. Los eventos políticos en Francia, los Países Bajos, Irlanda y Grecia podrían distraer la atención de la economía española durante un tiempo, lo que supondría una oportunidad para los valores españoles para “recuperar el aliento”.
