El perfil del inversor en criptomonedas es el de un hombre con una edad media de 40 años, estudios universitarios e ingresos superiores a 3.000 euros al mes, según un estudio difundido este viernes por la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV).
La encuesta realizada por el supervisor bursátil revela que los inversores en criptodivisas son fundamentalmente hombres, el 66%, frente al 34% de mujeres; con una edad media de 40 años, aunque con un peso importante entre las edades de 25 y 44 años.
La mayoría, un 43,3%, son personas con estudios universitarios, y un 41% con ingresos superiores a 3.000 euros al mes, mientras que solo el 10,7% gana menos de 1.000 euros.
De los inversores actuales, algo más de la mitad lo hace de manera ocasional, cuando se producen caídas en el valor de estas criptodivisas o dispone de dinero para invertir.
Según la CNMV, los inversores en criptomonedas hacen un uso más intensivo de las redes sociales y de las tecnologías de la información y la mayoría invierte menos del 5% de su capital.
Respecto a la percepción del riesgo, el 66,3% cree que tienen más que otros productos, el 28,7% piensa que son los mismos y el 5% restante no lo sabe. Asimismo, el 44,7% de los inversores piensa que estos activos no están regulados por ley ni supervisados por una institución y el 88% recuerda advertencias de organismos relacionadas con su riesgo, especialmente sobre la volatilidad y la posibilidad de perder toda la inversión.
Por otro lado, la CNMV señala que tres cuartas partes de la población han oído hablar o saben en alguna medida que es una criptomoneda, aunque su conocimiento general sobre estas es muy reducido. De entre las personas que conocen estos productos (no solo inversores), el 68% recuerda advertencias sobre sus riesgos, posibilidad de pérdida del dinero invertido, la extrema volatilidad o los fraudes relacionados con esta tecnología.
La CNMV ha realizado este sondeo a través de la empresa Análisis e Investigación, sobre una muestra de 1.500 casos de la población general de entre 16 y 70 años y una muestra complementaria de inversores en criptomonedas, hasta disponer de 300 casos.
