Los Presupuestos Generales del Estado recogen una partida de 8.537 millones de euros en materia de Defensa, lo que supone un incremento del 1,6% con respecto al ejercicio anterior, cuando se destinaron 8.401 millones a este concepto. Esto implica que el 2,3% del total del presupuesto, frente al 2,4% de 2018.
El ligero incremento de esta partida presupuestaria se produce en un momento histórico en el que el presidente de Estados Unidos, Donald Trump, ha presionado a los Estados miembros de la OTAN desde el principio de su mandato para que su gasto en Defensa alcance el 4% del PIB.
En el Libro Amarillo de los Presupuestos 2019, se especifica que durante este año se mantendrá la asignación para las operaciones exteriores, destinadas a la "lucha contra el terrorismo, la proyección de estabilidad y defensa del territorio aliado".
La dotación que se realizará para inversiones reales -excluidas las dotaciones destinadas a Operaciones de Mantenimiento de la Paz (OMPs)- ascienden a 2.648 millones de euros. Este ministerio tendrá, asimismo, créditos para gastos de personal por valor de 4.608 millones y 897 millones para gastos operativos.
El proyecto presupuestario -que deberá ser sometido a votación en el Parlamento- también asegura la reposición de los efectivos necesarios mediante la convocatoria de ofertas de empleo público, con un límite de efectivos de militares profesionales de tropa y marinería de 79.000.
Seguridad y prisiones
En las cuentas para 2019, pactadas por el Gobierno y Podemos, también se contempla un incremento del 5,5% en la partida destinada a seguridad ciudadana e instituciones penitenciarias, que ascenderá a 8.879 millones de euros (8.418 en 2018).
Las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado recibirán, en total, 6.408 millones de euros, es decir, el 6,7% más que en 2018. El 83,4% de esta cantidad se destinará a pagar al personal, en una partida que incrementará después de que se pactara con los sindicatos y asociaciones profesionales la equiparación salarial de la Policía Nacional y la Guardia Civil.
Las principales actuaciones desarrolladas en este área serán la lucha contra la delincuencia organizada en general y contra el terrorismo en particular, contra el tráfico de drogas y el blanqueo de capitales, contra la inmigración irregular, la protección y defensa de los derechos y libertades de los ciudadanos, la prevención de la seguridad ciudadana, la formación y especialización de las Fuerzas y Cuerpos de Seguridad del Estado, así como el fomento de la colaboración y coordinación de dichas Fuerzas y Cuerpos con otros Cuerpos Policiales, tanto en el ámbito nacional como internacional, según se expone en el Libro Amarillo.