Ryanair ha cancelado este viernes casi 400 vuelos por la huelga de 24 horas convocada por los pilotos de la aerolínea irlandesa en Alemania, Bélgica, Suecia e Irlanda, una movilización que afecta a unos 67.000 pasajeros.
Se trata de la primera protesta conjunta que efectúan los pilotos en la historia de la compañía, a la que reclaman avances en las negociaciones que mantienen desde principios de este año sobre salarios y condiciones laborales.
Esta huelga de pilotos sigue a las organizadas a final del pasado mes por los tripulantes de cabina (TCP), que llevaron a Ryanair a suspender más de 600 vuelos en dos días y a endurecer su posición ante las demandas de los sindicatos, con advertencias de despidos y de reducción de sus operaciones.
El parón de este viernes está secundado por la Asociación Sueca de Pilotos (SPF), los pilotos afiliados a la federación sindical belga (CNE), el sindicato alemán Vereinigung Cockpit (VC) y la Asociación de Pilotos Irlandeses de Aerolíneas (Ialpa), que ya ha organizado cuatro protestas similares en este país desde el 12 de julio.
El 16% de sus vuelos
En total, Ryanair ha eliminado 396 de los 2.400 vuelos programados ese día, el 16% de los que prevé operar en toda su red europea, compuesta por 87 bases en 37 países. Los sindicatos de pilotos consideran que Ryanair no ha mejorado significativamente sus condiciones laborales y salariales desde que anunció el pasado diciembre que, por primera vez en sus 32 años de existencia, reconocería a sus representantes independientes.
Para la compañía, detrás de estas movilizaciones está "un diminuto grupo de pilotos" de la rival irlandesa Aer Lingus, parte del grupo hispano-británico IAG, que "trabaja ahora con otros sindicatos de pilotos en toda Europa" para organizar protestas.
Pérdida de empleos
Asimismo, la aerolínea, líder en Europa del sector de bajo coste, ha reiterado que no cederá ante las demandas que pongan en riesgo su modelo de negocio, al tiempo que ha advertido de que podría reducir su calendario de vuelos invernal y su flota de aviones, con la posible pérdida de cientos de empleos.
En este sentido, Ryanair presentó el pasado mes un plan encaminado a reducir un 20%, de 30 a 24 aviones, su flota en Irlanda a partir de octubre, con la posible supresión de más de 300 puestos de trabajo, en respuesta al impacto de las movilizaciones de sus empleados.