La sentencia del 'caso Bankia' se vuelve a retrasar por culpa del coronavirus, según fuentes conocedoras de la situación consultadas por Vozpópuli. Aunque la magistrada ponente, Ángela Murillo, sigue trabajando desde su casa y va pasando borradores a sus compañeros y deliberando de forma telemática, es evidente que el Covid-19 retrasará aún más este escrito porque se ha ocasionado "un tapón en la justicia".
Esto se debe a que se han suprimido todos los servicios esenciales y a que la misma magistrada tiene que resolver otras cuestionas que también se han aplazado por la situación del Estado de alarma. No obstante, las mismas fuentes reconocen que aún estamos en plazo porque la sentencia se esperaba para después de semana santa, incluso para el mes de mayo.
La última etapa del juicio se celebró durante más de 10 meses con 74 sesiones y con las declaraciones de los 34 acusados, entre ellos, el expresidente de la entidad, Rodrigo Rato, que se la acusa de estafa a inversores y falsedad en las cuentas del grupo de 2010 y 2011.
Piden ocho años para Rato
Ahora, el tribunal deberá decidir si atiende a la petición de la fiscal, Carmen Launa, que pide ocho años y medio de prisión para Rato; seis años de prisión para el ex consejero ejecutivo de Bankia, José Manuel Fernández Norniella; cinco años de prisión para el exvicepresidente de la entidad José Luis Olivas, y hasta nueve meses para su sucesor, Francisco Verdú.
También solicita penas de entre dos años y un año de cárcel conmutable por multa para los exconsejeros del grupo con presencia en los comités de auditoría, entre ellos sus antiguos presidentes, el exministro del Interior Ángel Acebes, y Alberto Ibáñez, así como para el interventor de Bankia, Sergio Durá, y el socio auditor de Deloitte, Francisco Celma.