El Gobierno ha adjudicado 72 millones de euros en ayudas a Adamo, un operador de telecomunicaciones de capital sueco que ofrece servicio en zonas rurales o de difícil acceso.
Esta compañía ha sido la gran beneficiada de los en torno a 106 millones de euros repartidos en ayudas por el Gobierno a través de fondos europeos, dentro del programa de extensión de la banda ancha de nueva generación aprobado hace tan sólo unos meses.
Lo ha hecho en un concurso en el que participaban Telefónica, Orange, Másmóvil y otros operadores de menor tamaño. La compañía de telecomunicaciones dirigida por José María Álvarez-Pallete se hizo con 23 millones de euros para emplearlos en ampliar la cobertura de Internet en 11 regiones con diversas zonas poco pobladas, con necesidades de conectividad y de acceso complicado.
Orange, por su parte, no ha logrado hacerse con ni un solo paquete de ayudas, pese a que se postuló para ocho localidades. Un resultado idéntico al de Másmóvil, que en su caso trató de recibir ayudas en proyectos destinados a seis regiones. El Ministerio de Industria, Comercio y Turismo también decidió no otorgar ayuda alguna al operador amarillo.
Por último, Vodafone no aparece en ninguno de los pliegos de adjudicación de ayudas publicadas por el Ministerio de Industria, por lo que se puede deducir que no participó en concurso alguno. Sí lo hicieron sin embargo otras compañías más pequeñas, algunas de las cuales resultaron ganadoras, caso de Operadora Ibérica de Redes y Servicios de Telecomunicaciones (3,8 millones de euros adjudicados), Antenas y Sistemas de Comunicaciones (3,5 millones de euros) y Fibra Medios Telecom (3,4 millones de euros).
Programa de extensión de la banda ancha
"El objetivo que se persigue con estas convocatorias es el de acelerar la extensión de la cobertura de las redes públicas de comunicaciones electrónicas capaces de proporcionar servicios de banda ancha de muy alta velocidad a las zonas sin cobertura actual ni prevista en los próximos años (zonas blancas) así como a aquellas que la tienen de un sólo operador (zonas grises), lo que permitirá mejorar la funcionalidad y la calidad de los servicios digitales necesarios para la transformación digital y con ello aumentar el bienestar y la calidad de vida de los ciudadanos", explica el Ministerio de Industria.
El programa está cofinanciado por el Fondo Europeo de Desarrollo Regional (FEDER). En total, la cuantía total para esta convocatoria es de un máximo de 149,5 millones de euros, que se reparten entre cada una de las 45 provincias incluidas en la convocatoria.
El máximo económico otorgado del montante total de estas subvenciones varía entre el 50% y el 80%, dependiendo de la comunidad autónoma receptora de las mismas. El Fondo Europeo de Desarrollo Regional, del cual provienen los fondos, tiene como fin último "fortalecer la cohesión socioeconómica dentro de la Unión Europea corrigiendo los desequilibrios entre sus regiones", explican desde Bruselas.
