El 90,54 % de los trabajadores de la planta de Alcoa en A Coruña ha votado este lunes a favor del preacuerdo alcanzado con la multinacional aluminera estadounidense para mantener la totalidad de los puestos de trabajo hasta el 30 de junio mientras se busca un comprador para esta planta y la de Avilés, que también ha respaldado el documento.
La consulta, a la que estaban llamados a participar 383 trabajadores, contó con 316 votos favorables al preacuerdo, 22 contrarios, 8 en blanco y 3 nulos, según datos del comité de empresa, que ha calificado la participación -349 votos emitidos, un 91,12 % del censo- de "histórica".
De este modo, el comité de empresa de la planta de Alcoa en A Coruña pasará a trasladar mañana este resultado a la multinacional, dando paso a un periodo de seis meses en los que está previsto que el Gobierno central detalle un estatuto del consumidor electrointensivo que mejore las condiciones de las fábricas de cara a su venta.
Los empleados han acudido a votar en los cambios de turno -de 7.00 a 9.00 horas, de 13.00 a 15.00 y de 21.00 a 23.00- y, tras el cierre de las urnas y el escrutinio, los resultados han sido publicados al filo de la medianoche.
"Este nuevo escenario no es más que la continuación en nuestra lucha"
El voto favorable de las plantas de Alcoa en A Coruña y Avilés -que aprobó esta misma tarde el preacuerdo con un 91,4 % de los votos- era una condición indispensable para seguir adelante con el proceso.
"Este nuevo escenario no es más que la continuación en nuestra lucha", ha adelantado el comité de empresa a través de un comunicado, en el que ha convocado una concentración el próximo jueves 24 de enero a las 18.00 horas frente a la Delegación del Gobierno en Galicia, en A Coruña, para reclamar una nueva regulación para empresas electrointensivas.
Nuevas movilizaciones
Los trabajadores ya habían anunciado su voluntad de seguir movilizados a lo largo de los seis meses de negociación que quedan por delante, por lo que también han anunciado que el próximo 2 de febrero también llevarán a cabo concentraciones ante las autoridades portuarias en Vigo y Vilagarcía de Arousa.
De acuerdo a los términos del preacuerdo, si hubiera un acuerdo con un comprador Alcoa asumiría el coste de arrancar las cubas hasta un límite de 40 millones de euros (20 millones por cada planta), pero la venta estaría condicionada a que el inversor interesado asuma la totalidad de los puestos de trabajo de ambas instalaciones.
El fabricante de aluminio ofreció, a la espera de ofertas de compra, una solución para cerca de 355 empleados, más de la mitad de los 623 trabajadores indefinidos de ambas plantas, mediante prejubilaciones o recolocaciones.
El Gobierno, que ha avanzado que hay contactos con posibles inversores, se ha comprometido a trabajar para minimizar el impacto sobre los trabajadores.
