El 'tsunami' del coronavirus ha arrasado con el crecimiento del empleo turístico de los últimos cuatro años previos a la pandemia, cuando el sector acumulaba cifras récord en España. En enero, los afiliados a la Seguridad Social vinculados a actividades turísticas se desplomaron un 14% en términos interanuales, hasta los 2.006.400 trabajadores, rompiendo con la tendencia positiva iniciada en el mismo mes de 2014 y retrocediendo a los niveles alcanzados en 2016.
Esto ha reducido el peso del turismo en el total de afiliados en la economía nacional, que si bien hace un año suponía el 12,5%, en enero representaba solo el 10,7%. La tendencia negativa en el empleo turístico arrancó el pasado marzo, con el estallido de la pandemia en España, y se mantiene con caídas de entre el 10% y el 15% mes a mes en la cifra de afiliación. De esta forma, se ha perdido el empleo generado en los años previos a la crisis sanitaria, cuando se registraban crecimientos interanuales de entre un 3% y un 7% cada mes.
En el conjunto del 2020, el número de trabajadores afiliados en alta laboral -tanto asalariados como autónomos- en las actividades características del turismo rondaron los 2,22 millones, una cifra que se aleja de los 2,47 millones de 2019 y se acerca más a los 2,19 millones de 2016. Esto teniendo en cuenta que en los dos primeros meses del año, enero y febrero, este sector seguía creando empleo; y que el desplome se ha contenido gracias a la figura de los ERTE.
En 2021 se mantiene el ritmo de destrucción de empleos. Los datos publicados este martes por Turespaña -organismo dependiente del Ministerio de Industria, Comercio y Turismo- reflejan que en enero los afiliados vinculados a actividades turísticas decrecieron interanualmente en 327.341 trabajadores.
La disminución se registró en todas las ramas turísticas: la hostelería decreció en 251.758 afiliados (el 81% en los servicios de comidas y bebidas, y el 19% en los servicios de alojamiento); en las agencias de viajes hubo una disminución de 9.003 trabajadores; y en "otras actividades turísticas" se perdieron 66.580 afiliados.
El empleo asalariado en el sector se redujo un 17,3% y el autónomo un 1,5% en enero. Por comunidades autónomas, los mayores descensos se dieron en Andalucía, Cataluña, Comunidad de Madrid, Canarias y Comunidad Valenciana. Estas cinco comunidades conjuntamente suponen el 69,3% del descenso interanual absoluto. Andalucía fue la comunidad donde más bajaron los asalariados y la Comunidad de Madrid donde más bajaron los autónomos.
Arrancan los ERE
Tras un 2020 bajo mínimos, el sector ha arrancado el 2021 con el 86% de la demanda bloqueada y espera una caída en las ventas cercana al 80% en los primeros tres meses del año, según revelaba hace semanas la patronal Exceltur, que representa a las empresas más importantes del turismo. Más de la mitad del sector no espera recuperar los niveles de facturación antes de 2023.
Así las cosas, miles de empresas se asoman al abismo de la quiebra y los despidos masivos comienzan a negociarse como única solución para sobrevivir. En el sector hotelero, la gran cadena NH comunicó la semana pasada su intención de llevar a cabo un despido colectivo en sus servicios centrales y corporativos en España, ubicadas fundamentalmente en Madrid, que podría afectar a unos 300 empleados.
En las agencias de viajes, los ERE llegaron antes de que acabara el 2020. a primera fue Viajes Carrefour, que solo dejará en pie 21 de las 86 agencias del grupo. Poco después Vozpópuli avanzaba el inicio de un expediente en W2M, la división de viajes de Iberostar, que ha cerrado un ERE para 246 empleados.
Logitravel también amenaza con acabar con parte su plantilla en España, tal y como avanzó Vozpópuli. Asimismo, uno de los principales buscadores de viajes online, Expedia, también negocia un ERE en España, donde cuenta con una plantilla de algo más de 200 empleados; y TUI, el gigante alemán de la turoperación, pretende suprimir el 14% de su plantilla en nuestro país.
En este contexto, desde la patronal Exceltur reclaman un plan de rescate específico para el turismo basado en tres pilares: acelerar el ritmo de vacunación, alargar los ERTE al menos hasta final de año, y ayudas directas de 5.326 millones de euros para asegurar la supervivencia en 2021 de "muchas empresas turísticas españolas viables". "El coste social y laboral que puede suponer la desaparición de decenas de miles de empresas será mucho mayor que las posibles ayudas", comenta José Luis Zoreda, vicepresidente de Exceltur, en conversaciones con este periódico.
La patronal percibe como una buena noticia que el Ministerio de Economía esté contemplando ayudas directas para el sector, aunque advierte de que "si es a base de deuda, puede generar problemas de liquidez". Y avisa: a la espera de que el Gobierno diseñe la fórmula para apoyar a las empresas, muchas pequeñas y medianas empresas y autónomos con menos músculo financiero pueden quedarse por el camino. "Cada día se agrava más la situación", sentencia Zoreda.