Los aeropuertos españoles de Aena se preparan para la "nueva normalidad". Tras varios meses sin apenas vuelos -salvo los destinados a repatriaciones y servicios mínimos- por la irrupción de la covid-19, los principales operadores aéreos han marcado su vuelta a la actividad para mediados de junio o principios de julio, cuando previsiblemente se permitirá la movilidad por el país a los turistas españoles y europeos.
El pasado mes de abril, el gestor aeroportuario constituyó el llamado Grupo de Recuperación Operativa, centrado en definir las medidas necesarias para que, en el momento en que se levanten las limitaciones a la movilidad, las operaciones se recuperen "de forma segura en función de la demanda" y "siguiendo las recomendaciones de las autoridades sanitarias y del transporte".
Hace una semana la Agencia de Seguridad Aérea de la Unión Europea (EASA) y el Centro Europeo para la Prevención y el Control de Enfermedades (ECDC) hicieron públicas las medidas que deberán adoptar los pasajeros, operadores aéreos y aeroportuarios para garantizar la seguridad de la salud de los viajeros y el personal de aviación.
Entre las medidas de las autoridades europeas destacan la necesidad de mantener una distancia física de 1,5 metros en el aeropuerto; especialmente durante la facturación, el control de seguridad, el momento antes de embarcar y el embarque. También obligan a los pasajeros a usar mascarillas dentro de las instalaciones aeroportuarias y en el avión, reemplazándolas tras cuatro horas de uso. En este sentido, piden a los aeropuertos que incorporen máquinas expendedoras.
Estas son sólo algunas de las recomendaciones que hace EASA. Ahora, tal y como informan fuentes de Aena a este medio, "las medidas se tienen que trasponer a nuestro país". Por ejemplo, en cuanto a los controles de temperatura inmediatamente después de ingresar a las instalaciones, sólo recomienda que se lleven a cabo si las autoridades locales lo ordenan, y en el caso de España aún no hay una decisión al respecto y para las que "habrá que esperar", indican las mismas fuentes.
No obstante, Aena explica a Vozpópuli que hay medidas básicas que se han adoptado en toda la red de aeropuertos desde el inicio de la pandemia -como son la desinfección y limpieza constante o la información a pasajeros y trabajadores por megafonía, cartelería y redes sociales-, y otras que se han comenzado a implementar en los aeródromos de mayor actividad, como el de Madrid-Barajas, Barcelona-El Prat, Valencia o Málaga. Estas son, por ejemplo, la instalación de mamparas en los mostradores o señalización de las distancias de seguridad recomendadas.
Confusión con las distancias
El Aeropuerto de Madrid-Barajas es uno de los primeros en ponerse a punto para la llegada de turistas. Aena ya ha instalado mamparas en los mostradores de facturación, de atención al cliente o en los controles de seguridad. También informa de que es obligatorio el uso de mascarillas a través de sus paneles digitales y ha señalizado la distancia de seguridad en las zonas de especial afluencia, como las colas de check-in o control de seguridad.
Sin embargo, no queda claro cuál es el espacio que debe haber entre los pasajeros. En algunas de las pantallas informativas, Aena sitúa la distancia mínima en 2 metros y en otras en 1,5 metros. Además, en las colas de facturación, el cartel informativo del gestor aeroportuario reduce la distancia de seguridad a un metro. Fuentes del aeropuerto aseguran que esto podría depender de lo concurrida que esté una zona.
En las zonas públicas del aeropuerto aún no se han incorporado dispensadores de gel hidroalcóholico para los pasajeros ni máquinas dispensadoras de mascarillas. El Ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana también informa de que, en el marco del Plan de Recuperación Operativa, durante la primera fase "se limitarán los accesos de los acompañantes a las terminales, se potenciará la facturación online, se adaptarán los controles de seguridad".
Ya en una segunda fase, "se llevarán a cabo toda una serie de inversiones tanto de desarrollo tecnológico como de infraestructuras, que permitan la aplicación de medidas permanentes de distanciamiento físico". El Gobierno prevé levantar las fronteras intraeuropeas y eliminar la obligatoriedad de guardar cuarentena para los ciudadanos que lleguen a nuestro país a partir del mes de julio; aunque tal y como avanzó Vozpópuli hace días, estudia hacerlo incluso antes en aquellos destinos que salgan en junio de la 'desescalada'.
España ya ha anunciado esta semana que quiere crear 'rutas seguras' entre las regiones turísticas que previsiblemente entrarán en la "nueva normalidad" a mediados de junio, como Baleares y Canarias, y otros territorios europeos con una situación epidemiológica similar, como algunos länder alemanes.
Para entonces, y aunque las medidas de seguridad no están del todo definidas y el Gobierno "irá dando los pasos necesarios" durante las próximas semanas, sí avanza que pretende mantener "medidas de control como la toma de temperatura, la cumplimentación de cuestionarios o la monitorización de las personas que entren a través de los aeropuertos y puertos".
