La retirada de estímulos del Gobierno tendrá que esperar. O eso es lo que se desprende de las palabras de la consejera delegada de Bankinter, María Dolores Dancausa, que da por hecho que las moratorias y los créditos ICO se ampliarán a 2021. La banquera señaló este jueves que los niveles de mora no se elevarán excesivamente el próximo año porque seguirán aplicándose las medidas que se pusieron en marcha durante el estado de alarma.
Estas palabras las pronunció en un contexto en el que señaló también que era inevitable que la morosidad de los bancos se elevará en los próximos años. Pero Dancausa apuesta más por 2022. Aún así, la consejera delegada de Bankinter admite que es un problema inevitable y que su dureza dependerá de lo rápido que se recupere la economía. Y es que los principales banqueros de este país temen que cuando se corte el grifo se desate una crisis aún más grande, tal y como ya publicó Vozpópuli.
El actual vicepresidente del Banco Central Europeo (BCE), Luis de Guindos, advirtió durante su ponencia en el 'XI Encuentro Financiero' organizado por KPMG y Expansión que la retirada de los estímulos tiene que ser "pausada" y "acompasada a la evolución de la economía", para evitar el llamado "efecto precipicio".
El mismo tono precavido mostró el consejero delegado de Banco Santander, José Antonio Álvarez, que subrayó que una brusca retirada de los estímulos puestos en marcha por los Gobiernos y los Bancos Centrales desencadenaría un "riesgo de caída muy rápido".
Los bancos ya están ampliado los periodos de carencia de las moratoria pero también están analizando con el Ministerio de Economía diferentes medidas para poder ampliar esta medida o los propios créditos ICO en el tiempo. Es decir, eliminar el límite de cinco años que fijó la Comisión Europea (CE).
El ICO también ha tranquilizado a la banca al señalar que es posible ampliar el periodo de carencia de estos créditos que se había fijado en 12 meses. Es decir, que el próximo mes de abril se comenzaría a cobrar por esos préstamos y es muy probable que un alto número de empresas no pueda hacer frente a estos pagos.
Bomba de relojería
La banca tiene 'dormidos' 100.000 millones de euros en créditos hipotecarios y de consumo mediante el sistema de moratorias que confeccionó el Gobierno para hacer frente a los problemas de solvencia de las familiasdespués del parón económico que provocó el confinamiento de la población española en marzo de 2020.
Según los datos recogidos por Barclays y ofrecido por las propias entidades, el Banco Santander sería la entidad más perjudicada, pues cuenta con un 17% de la cartera hipotecaria bajo moratoria y el 13% de otro tipo de créditos. Esto supone una suma de 64.000 millones de euros. El grupo cántabro cuenta con exposición a otros países y por eso su cartera es mayor a la de sus competidores en España.
Caixabank, después de fusionarse con Bankia tendría el mismo volumen de su cartera hipotecaria bajo moratoria -17%-, aunque el capital es inferior, de 13.000 millones de euros. En cuanto a la cartera de otros créditos, asciende 4.300 millones de euros, un 16% del total, siendo esta la más elevada en porcentaje si se compara con las otras entidades.
BBVA suma 9.000 millones de euros en hipotecas bajo moratoria, el 11% de la cartera. En otros créditos contabiliza 9.000 millones adicionales, un 13% del total. Banco Sabadell tiene bajo moratoria un total de 6.300 millones de euros y Bankinter sólo mil millones, todo en hipotecas.