El comercio esperaba una Navidad con unos resultados muy cercanos a los conseguidos antes de la pandemia, pero sus previsiones han empeorado en las últimas semanas. A la nueva cepa, Ómicron, y a las posibles derivadas de su llegada (restricciones en horarios o aforos) se suma el incremento de los precios generalizado, que está haciendo que los consumidores vuelvan a mirar el detalle de sus compras.
De hecho, la confianza del consumidor bajó 12,7 puntos en noviembre en relación al mes anterior, hasta situarse en 84,6 puntos. La cifra se trata de la menor desde el pasado abril, según los datos del Centro de Investigaciones Sociológicas (CIS) y, de hecho, suma dos meses consecutivos de retrocesos.
"El dato de la confianza del consumidor, unido al resto de factores, apuntan a que podríamos no llegar al 90% de recuperación que preveíamos", explican fuentes de la Confederación Española de Comercio (CEC), que representa a las pequeñas y medianas empresas del sector.
Lejos del optimismo de septiembre, mes en el que los dueños de las tiendas confiaban en poder levantar las ventas durante los próximos meses, los comerciantes temen que la evolución de la campaña de vacunación no esté siendo suficiente para evitar limitaciones al sector.
El comercio, preocupado por los precios
"Se nos hace imposible ahora dar una cifra de lo que pueden ser nuestras ventas, porque dependemos de factores que aún no sabemos cómo van a evolucionar", apuntan las mismas fuentes. De hecho, el del CIS no es el único dato que preocupa a los comercios. Cabe recordar que el Índice de Precios de Consumo (IPC) situó su tasa interanual en noviembre en el 5,6%, lo que se traduce en dos décimas más que en octubre y significa su nivel más alto registrado desde 1992.
La campaña de Navidad es el momento más relevante en ventas para los comercios, suponiendo en algunos casos hasta el 60% de su facturación. En un contexto de inflación, los comerciantes ponen el foco en "el precio final del los productos y la consiguiente afectación en la capacidad de gasto de las familias", explicó la CEC hace unos días en un comunicado, en el que insistía además en "el posible aumento de los costes sobrevenidos referenciados a la evolución del IPC para las pymes y autónomos del comercio", por ser otro de los factores "que puede lastrar la recuperación del sector".
La patronal del comercio teme, además, que se aprueben nuevas restricciones tanto a la movilidad como la actividad del comercio, relacionadas estas con horarios o aforos. Según los dueños de las empresas, estas limitaciones afectan de forma directa al consumo, por lo que su sola aprobación "hace que los clientes vayan menos a las tiendas o no vayan".
Según un estudio de Gelt, a pocos días de las Navidades, los españoles marcan una tendencia al control del gasto. En concreto, el 65% de los compradores elegirá productos de oferta, mientras que el 19% optará por lo más barato, el doble que hace tan solo un mes.