Frente a la repercusión mediática de la Champions League y el poderío económico de los 32 mejores clubes europeos, el Mundial de naciones sigue siendo la cúspide del fútbol. Y no solo por el componente sentimental amateur y hasta patriótico, sino que todavía también por dinero: a día de hoy, no hay plantel que valga más en el planeta que la nómina de Inglaterra o Brasil.
La edición en Qatar tendrá la particularidad de permitir selecciones de 26 integrantes (por los 23 tradicionales), lo que incrementa su potencial. No obstante, incluso sin esos tres jugadores adicionales, tanto la selección de Inglaterra como la de Brasil seguirían cotizando más de 1.100 millones de euros cada una (la Seleção solo perdería siete millones de valor, en tanto que los ingleses caerían en 43 millones). La cotización de ambos rebasaría, en cualquier caso, la del todopoderoso Manchester City relanzado por el capital de Abu Dhabi.
La plantilla que dirige Pep Guardiola se acerca a los 1.100 millones pero se queda algo por debajo, superando, eso sí, a Francia, que ronda los 1.000 millones de valoración aun sin el lesionado Karim Benzema.
El valor de la selección gala y vigente campeona del mundo excede al del buque insignia del país a nivel de clubes, el París Saint Germain impulsado por el fondo Qatar Sports Investments. Incluso con Kylian Mbappé, Neymar y Lionel Messi en la plantilla, el PSG se queda en los 890 millones.
Inglaterra, Brasil y el Manchester City son los únicos tres equipos en el mundo cuyas plantillas mueven más de 1.000 millones de euros (Francia hubiera entrado en ese grupo con Benzema).
Los 32 clubes de la Copa de Europa suman un valor un 10% superior al de las selecciones mundialistas, pero para ganar a los más valiosos, hay que ganar el Mundial: cuatro de los cinco equipos más cotizados están ahora en Qatar.
La convulsa pero talentosa Portugal o la propia selección española (si se incluyen los 40 millones del lesionado Gayá en lugar de los 15 de Balde) llegan a cotizar entre 900 y 1.000 millones (solo Pedri vale 100 millones). Ambas selecciones presentan cifras superiores a las del equipo español más valioso, el Real Madrid, cuya plantilla cuesta 839 millones, un 50% menos que Inglaterra y un 35% menos que Brasil, según la información que aportan la tasadora de referencia Transfermarkt y Sportingpedia.
Incluso Alemania vale más que el último campeón de la Champions, con una cotización que asciende hasta los 886 millones. El Barca de las palancas de Joan Laporta aparece más atrás, con un valor de 799 millones.
El valor del Mundial: entre el mercado y el talento natural
La cotización de los jugadores bebe a nivel individual de la forma física, el rendimiento actual y el potencial por juventud -si bien el promedio de edad entre las selecciones, como se verá en la gráfica más abajo, es similar-. A nivel general, la tasación de los futbolistas entronca con la situación financiera de sus ligas, lo que explica la creciente ascendencia de la valoración del fútbol inglés, con el Manchester City, el Liverpool o el Chelsea entre los clubes más cotizados.
Un efecto que acaba revirtiendo en los jugadores nativos de esos países ante la competencia planteada por el talento internacional. Así lo deja traslucir el caso de la selección inglesa, resultando la más cotizada pese a llevar más de medio siglo sin un título. Sus futbolistas más valiosos son el mediapunta del Manchester City Phil Foden, el mediocampista exBirmingham y ahora en el Dortmund Jude Bellingham, y el delantero del Tottenham Harry Kane.
Algo diferente es el caso de Brasil, principal favorita en las apuestas que sigue siendo la selección con más títulos mundiales: cinco. Detrás de su valor confluyen su marca histórica con una nueva camada de jugadores de alto rendimiento que ya ganaron la Copa América 2019 y que conforman los equipos más cotizados.
Vinicius Jr. y Rodrygo sobresalen entre los más valiosos del Real Madrid, Neymar solo tiene por delante en el PSG a Mbappé y está seguido de un compatriota, el defensa Marquinhos; Anthony es el jugador más cotizado del Manchester United y Gabriel Jesús ocupa el podio del Arsenal, mientras que los porteros Alisson y Ederson aparecen entre los puntales del Liverpool y Manchester City. A Qatar, Brasil llega con veinte años sin ganar un Mundial.
El fútbol parece estar lejos de ser una matemática. Sí así lo fuera al menos sería difícil comprender el cartel de favorito con el que llegan algunas selecciones, como es el caso de Argentina
Para bien o para mal, el fútbol parece estar lejos de ser una matemática. Sí así lo fuera, sería difícil comprender fenómenos como el de la última Champions del Real Madrid -que incluso, tras ser campeón, ni siquiera aparece entre los cinco clubes más cotizados- o el cartel de favorito con el que llegan algunos países al Mundial, como es el caso de Argentina.
La selección que capitanea Lionel Messi tiene otras seis por delante, y una decena de clubes por encima de su valor, de unos 633 millones, inferior al del sexto inglés -el Tottenham- y levemente por encima del Milan. Sin embargo, su título en la Copa América de Brasil 2021 y la apariencia de solidez de un equipo con un invicto de 36 partidos en torno al veterano pero todavía mayor ganador de Balones de Oro de la historia le granjean la etiqueta de candidato.
Ratwulf
El mundial de la mafia y la vergüenza, eso es lo que es. Yo boicot total!