Hacienda se anota una primera victoria frente al empresario Antonio Catalán. El fundador de NH Hoteles y AC Hotels by Marriott ha perdido el recurso presentado contra el acuerdo de liquidación propuesto por Hacienda con respecto al IRPF de 2007 a 2009 valorado en 361.530,53 euros, y un acuerdo sancionador derivado del mismo procedimiento de 133.786,30 euros. El fisco le acusa de simular una actividad de arrendamiento, mediante la interposición de sociedades, para rebajar su factura fiscal y pagar menos IRPF.
En concreto, el empresario presentó un recurso contencioso-administrativo contra esta resolución del Tribunal Económico Administrativo Regional de Madrid (TEAR) que ha sido tumbado por el Tribunal Superior de Justicia de Madrid (TSJM), según consta en la sentencia fechada el pasado 2 de junio consultada por Vozpópuli. El tribunal ha confirmado en todos los extremos tanto la liquidación como el acuerdo sancionador.
El empresario es el dueño de la sociedad Anca Activos, que a su vez controla la totalidad del capital de la entidad AC Dos Hoteles en Renta, la cual “no desarrolla ninguna actividad empresarial”, según la citada sentencia. Esta sociedad tiene entre sus activos el domicilio particular del empresario en Madrid, una casa en Baqueira, un chalet en Ibiza, una casa en Palma de Mallorca, una embarcación de recreo y una masía en Girona. “Todos estos activos están destinados exclusivamente al uso y disfrute del recurrente, y no se realiza actividad empresarial con los mismos”, señala la Abogacía del Estado, representante de Hacienda en el caso.
La inspección considera probado que la sociedad AC Dos Hoteles Renta no realiza ningún tipo de actividad económica y, por tanto, no es cierto que se dedique a la tenencia y explotación de activos inmobiliarios. Hacienda considera que todos los activos están a disposición del empresario y recuerda que no se ha demostrado ningún arrendamiento con terceras partes.
“Resulta acreditado que realmente no hay una actividad de arrendamiento de bienes, sino que se trata de elementos que se encuentran a disposición del recurrente para su uso y disfrute, si bien se simula una actividad de arrendamiento, mediante la interposición de sociedades, sociedades que son un instrumento cuyo único fin es obtener un tratamiento fiscal distinto y más favorable del que correspondía a la operación realmente efectuada”, añade Hacienda.
Hacienda sanciona a Antonio Catalán
Y sigue: “En definitiva, bajo la apariencia de una actividad de arrendamiento por parte de la sociedad, se oculta la realidad y es que esos bienes están a disposición para su uso privado por el socio, persona física, que está obligado a tributar por ello en el Impuesto sobre la Renta de las Personas Físicas. De todo lo expuesto, resulta que el supuesto arrendamiento de bienes que realiza AC Dos Hoteles en Renta era un negocio simulado, exponiendo la Inspección con detalle todos los indicios que llevan a determinar la existencia de la simulación, -así los contratos de arrendamiento con entidades vinculadas, de los cuales no consta la realidad de los ingresos, y a un valor muy inferior al de mercado, cuando lo que existe detrás de todo ello es la disposición de estos bienes por parte del obligado, - con la única finalidad de reducir la tributación por el IRPF que le correspondería al socio”.
El tribunal, que avala todos estos argumentos, ha desestimado las alegaciones del empresario, que señalaba que estaba prescrito el derecho de la Administración a determinar la deuda tributaria y que hubo defectos en las notificaciones del procedimiento.
La sentencia no es firme y Catalán puede presentar un recurso de casación ante el Tribunal Supremo. Este diario ha intentado contactar por varias vías con AC Hotels para ampliar esta información sin haber obtenido ninguna respuesta.