El aeropuerto con más tráfico de España, el Adolfo Suárez Madrid-Barajas, se mantiene prácticamente vacío en estos días por el coronavirus. Apenas veinte aviones despegan al día en la Terminal 4 del aeródromo, los justos para mantener la conectividad aérea en el país y traer a los turistas de vuelta a casa. La mayoría de los gobiernos han cerrado sus fronteras para tratar de frenar la expansión de la pandemia y las aerolíneas han minimizado su actividad, a la espera de que cese la crisis.
Uno de los pocos pasajeros que transitaban la Terminal 4 de Madrid este martes intenta explicar a Vozpópuli el ambiente "enrarecido" que se vive en el aeropuerto madrileño: "Hay menos personal de lo habitual por la falta de pasajeros y todo el mundo lleva mascarilla. No he visto ningún avión despegar en dos horas y tampoco he visto ninguna puerta de embarque abierta o con gente esperando. Esto está desierto", relata.
Ante la falta de actividad, el gestor aeroportuario Aena está disminuyendo el personal y concentrando los vuelos que se mantienen estos días, la mayoría de ellos programados entre las 11.00 y las 18.00 horas. Por el momento, en la citada terminal operan los vuelos de Iberia, que pretende trabajar con el 20% de su plantilla tras suspender temporalmente el 80% de sus contratos, lo que se traduce en 13.900 empleos.
El ministro de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, ha cifrado en un 82% la caída del tráfico aéreo en la red de Aena. Por su parte, la Asociación de Líneas Aéreas (ALA) asegura que sólo para los meses de marzo y abril ya se han cancelado 97.000 vuelos. Un dato que previsiblemente seguirá creciendo, pues Ryanair, la aerolínea con más tráfico en nuestro país, estima que no volverá a volar hasta junio. Aunque lo cierto es que todas desconocen cuándo podrán hacerlo.
Cierre de terminales
Con esta situación, Aena ya ha anunciado que va a ajustar la capacidad de sus aeródromos. En el de Madrid, inicialmente la operativa de las terminales T2 y T3 se trasladará a la T1 para posteriormente agrupar todas en la T4. En el aeropuerto de El Prat de Barcelona, solo quedarán operativas las zonas A y D de la Terminal 1. Y también se cierran zonas en los aeropuertos de Canarias y Baleares.
En lo que respecta a los servicios aeroportuarios, se mantienen abiertos algunos servicios de restauración en los principales aeropuertos de la red, así como cantinas de empleados, para atender las necesidades esenciales de trabajadores, proveedores y pasajeros. También permanecen abiertas diversas tiendas de prensa y conveniencia, que venden artículos de alimentación y bebidas, y se presta especial atención al abastecimiento de las máquinas vending.
Sin embargo, según ha explicado el ministerio de Transportes, Movilidad y Agenda Urbana, José Luis Ábalos, habrá "actividades comerciales que no puedan estar operativas", por lo que Aena exonerará de los alquileres a los comercios que se vean afectados por la inactividad aérea. Una medida que también trasladará el administrador de infraestructuras ferroviarias, Adif, a los locales de sus estaciones ante la limitación de la oferta de AVE, Larga y Media Distancia.
En abril de 2019 pasaron por los aeródromos españoles 23 millones de personas, una cifra que previsiblemente este año se reducirá a mínimos históricos. La Asociación de Transporte Aéreo Internacional (IATA) augura una pérdida para el sector de hasta el 19% de los ingresos mundiales basándose en un escenario de amplia propagación del virus, que se traduce en al menos 113.000 millones de dólares.
El sector turístico pierde diariamente un millón de empleos por los efectos causados por el Covid-19, según el Consejo Mundial de Viajes y Turismo (WTTC), que advierte de que los despidos aumentan de ritmo a medida que los países se cierran para combatir el virus. "El cierre masivo de hoteles, la suspensión de la mayoría de los vuelos, el cese de las líneas de cruceros y las crecientes prohibiciones de viajes globales, están teniendo un catastrófico 'efecto dominó' que impacta a un gran número de proveedores en todo el mundo", advierte.