La vicepresidenta primera para Asuntos Económicos, Nadia Calviño, se reúne este viernes con las patronales de la banca y con las principales entidades financieras en lo que se ha transmitido como un encuentro para limar asperezas tras el anuncio por sorpresa de que se va a imponer un nuevo impuesto al sector. Una reunión en la que no estará la ministra de Hacienda, María Jesús Montero, y en la que Calviño pretende tratar otros temas como la inclusión financiera.
Tras el anuncio de Pedro Sánchez en el Debate sobre el Estado de la Nación el martes 12 de julio se fijó la cita para esta semana, para la que Calviño ha ganado tiempo situándola el viernes, al día siguiente de que el Banco Central Europeo (BCE) haya subido tipos. La vicepresidenta acude así al encuentro ya conociendo lo que se rumoreaba en los últimos días, que el alza iba a ser mayor de lo esperado, finalmente de 50 puntos básicos.
Una medida que favorece el relato del Gobierno, ya que Sánchez apoyó el anuncio en los beneficios extra que a su juicio a está percibiendo el sector por el alza de tipos, una subida que todavía no se había producido, pero aludiendo a continuación a lo que están ingresando extra en las hipotecas.
El anuncio sorprendió a la banca, pero también a Hacienda, que se enteraba horas antes y que pergeñó una previsión de recaudación para vestir el anuncio. De momento, sólo se conoce que el impuesto prevé recaudar 1.500 millones al año y estar en vigor dos años, 2023 y 2024, en principio, y que se aplicaría a empresas con una facturación de más de 1.000 millones de euros. Además de la intención de que la CNMC controle que no se repercuta a los clientes.
En plena elaboración del impuesto a las energéticas, para el que se sigue el ejemplo de Italia, Hacienda ha tenido que recuperar sus estudios sobre la imposición en el sector bancario, que analizó en 2018, y lo que han dicho al respecto los expertos a los que designado la ministra para que le asesoren en la reforma fiscal. Además del análisis que ha realizado la Autoridad Independiente de Responsabilidad Fiscal (AIReF) sobre la exención en el IVA de los servicios financieros.
Descartado que se busque gravar los beneficios a los que aludió Sánchez, que todavía no se han producido, y cuando las entidades no tienen apenas beneficios por su actividad en España, Hacienda estudia dos fórmulas: gravar comisiones e intereses y gravar la masa salarial de las entidades, como se está planteando la Comisión Europea.
En la primera fórmula podría aplicarse un tipo de cerca del 4%. El problema es que reviste complejidad y acarrea problemas de doble imposición porque estos conceptos ya los grava el Impuesto sobre Sociedades.
Hacienda también estudia gravar los salarios de las entidades financieras, una vía que intenta gravar el valor añadido generado por las instituciones financieras en una traslación de los Impuestos sobre las Actividades Financieras o Financial Activities Tax (FAT), que son impuestos sobre los salarios de las entidades exentas de IVA, que tienen en vigor Francia y Dinamarca.
El FAT sobre la masa salarial tiene precedentes sólidos y menos problemas jurídicos que gravar comisiones e intereses, pero podría suponer un desincentivo a la contratación en el sector.
Los ejemplos francés y danés
El impuesto francés sobre los salarios tiene como sujetos pasivos las entidades financieras. El tipo de gravamen es progresivo y aunque el impuesto se aplica sobre la totalidad de los salarios pagados, su cálculo se efectúa de manera individual. Es deducible como gasto en el Impuesto sobre Sociedades.
En el caso de Dinamarca, el impuesto no es susceptible de deducción ni de figurar como gasto deducible en Sociedades. La base imponible está compuesta por los salarios y, para el caso de las entidades financieras, el tipo de gravamen es del 15%.
La AIReF recoge estos ejemplos en su estudio sobre la exención del IVA de los servicios financieros. Constata que suprimir la exención recaudaría 2.800 millones al año y que su eliminación encarecería las hipotecas. "De eliminarse la exención, la carga impositiva recaería en los hogares que utilizan ampliamente estos servicios para adquirir sus viviendas y no se pueden deducir el IVA y, por tanto, la exención está permitiendo un abaratamiento en el acceso a los servicios financieros", advierte.
Sin embargo, la Autoridad Independiente lanza también el aviso de que "queda sin gravar el valor añadido generado por las entidades financieras. Por ello, en algunos países como Francia o Dinamarca han explorado otras vías para gravar este valor añadido a través de los denominados Impuestos sobre las Actividades Financieras".
Karl
«Hay gente que cree que el saqueo pierde toda su inmoralidad tan pronto como se legaliza. Personalmente, no puedo imaginarme una situación más alarmante.» ~Frédéric Bastiat, †1850
Wesly
Sacar dinero del bolsillo del empresario y del trabajador sujeto a la competencia para dedicarlo a la compra compulsiva de votos y al pago de escandalosos privilegios para políticos, empleados públicos y liberados sindicales, es lo que más mola a este gobierno de irresponsables e incompetentes.
xaxonem
El impuesto a la banca lo va a pagar el cliente. Es decir, que el gobierno vuelve a poner otro impuesto al ciudadano. Indirecto, pero impuesto al propio ciudadano.