Aun con los precios de los alquileres ya en máximos a nivel nacional e histórico en Barcelona por la falta de oferta, la apuesta de los fondos de inversión por la capital catalana se ha frenado en seco. La inversión institucional en proyectos de vivienda nueva para el alquiler en Barcelona, conocidas en el sector como promociones Build to Rent, retrocedió alrededor de un 90% en 2023, según se desprende de cifras de la consultora Savills Aguirre Newman cotejadas por Vozpópuli a raíz de una petición efectuada por la compañía Renta Corporación.
La inmobiliaria cotizada en la bolsa española acaba de alertar a sus inversores de la progresión el último curso del mercado en torno a la Ciudad Condal. Y ello, dentro de un marco de optimismo general hacia el ladrillo residencial en España pese al impacto de la subida de tipos de interés en la financiación de estos proyectos, con menores rentabilidades. De hecho, según Savills, la inversión en BTR en Madrid habría caído solo ligeramente en 2023, menos de un 5%.
La singularidad de la caída de la inversión en Barcelona acontece en un año marcado por la nueva Ley de Vivienda en el Estado que ha facultado, precisamente, a las autoridades catalanas para implementar el control de precios del alquiler
"En 2023, el apetito inversor por este tipo de activo -residencial- ha resistido ligeramente la embestida y se ha situado como el segundo segmento con una mayor inversión, impulsado por el "Build to rent”, que ha acumulado gran parte del capital", esgrimen desde Renta Corporación en un reciente folleto de emisión de pagarés. "A pesar de ello, Barcelona ha registrado una caída de en torno al 90% en la inversión en “build to rent”, mientras que en el caso de Madrid la caída se ha situado en un 3%. Asimismo, las rentabilidades exigidas han subido debido al incremento de tipos, situándose en torno al 4,25% en Barcelona y en 3,90% en Madrid".
De acuerdo a Savills, la inversión inmobiliaria en residencial fue de 2.200 millones de euros en 2023, una cantidad menor que en 2022, cuando se habían superado los 3.000 millones. En Barcelona, la inversión en proyectos de residencial habría descendido de cerca de 1.000 millones reales en 2022 a poco más de un centenar.
En el conjunto del mercado, según la misma fuente, en España se entregaron en 2023 más de 10.000 viviendas BTR. Una cifra consecuente a la inversión de los fondos desde el año 2019, aunque todavía muy alejada de las más de 600.000 viviendas que harán falta al cabo de 2025, según las proyecciones del Banco de España.
La oferta de vivienda se hunde en el mercado que topa el alquiler
La singularidad de la caída de la inversión en Barcelona acontece en un año marcado por la nueva Ley de Vivienda en el Estado que ha facultado, precisamente, a las autoridades catalanas para implementar el control de precios del alquiler. La nueva normativa ha habilitado a las autoridades autónomas que lo deseen para imponer bajadas de precio a grandes tenedores como los fondos de inversión, a la vez que ha complejizado los eventuales procesos de desahucio de inquilinos, en especial en el caso de los grandes tenedores, aunque también para los pequeños.
La empresa de intermediación para propietarios Alquiler Seguro presentó hace unos días un Observatorio del Alquiler que sitúa a Barcelona en el foco de las zonas más tensionadas del país. La proyección desde la misma firma de intermediación es que la oferta en torno a la Ciudad Condal caiga otro 20% en este 2024, hasta 107.536 pisos durante el año, que representarían un 37% menos que los 170.764 al cabo de 2019.