El consejo de administración de Pharmamar aprobó el viernes una retribución explosiva para su presidente, José María Fernández-Sousa, para este año y el próximo, en plena ebullición de la compañía en Bolsa al calor de los avances que va comunicando sobre su medicamento contra el coronavirus, Aplidin.
A propuesta de la Comisión de Nombramientos y Retribuciones y de Sostenibilidad, se acordó someter a votación de la próxima Junta General de Accionistas una modificación de la Política de Remuneraciones que afecta exclusivamente a la remuneración de Fernández Sousa. Los consejeros acordaron el viernes elevar la retribución tanto fija como la variable.
En cuanto a la parte fija de la remuneración del presidente y primer accionista de Pharmamar -Fernández Sousa posee el 11,1% de la compañía- el consejo acordó suspender la revisión que hasta ahora se hacía anualmente de la misma, vinculada al Índice de Precios al Consumo.
La retribución variable de Fernández Sousa pasa a ser de hasta un 100% de la retribución fija, cuando en 2020 fue del 50%
La compañía sostiene que ese indicador en función del IPC "no refleja su desempeño para la consecución de los objetivos estratégicos de la sociedad (...)", y afirma que es preferible una retribución fija alineada "con la recibida por cargos de análoga naturaleza en empresas comparables tanto por dimensión como por sector de actividad".
En 2022, la retribución fija del presidente podrá ser hasta un 15% superior a la recibida un año antes.
El consejo también acordó el viernes incrementar la retribución variable de Fernández Sousa, para que esta pase a ser de hasta un 100% de la retribución fija, cuando en 2020 fue del 50%. En 2021, la retribución variable del presidente, de esta manera, superaría el millón de euros.
Además, el pasado mes de junio la compañía modificó el Contrato de Prestación de Servicios Ejecutivos suscrito con Fernández Sousa el 26 de febrero de 2015, incrementando el límite máximo de la retribución variable del presidente, que pasa a ser de hasta un 50% sobre la retribución fija bruta anual establecida para cada ejercicio (en lugar del 30% anterior).
Los exministros Ana Palacio y Eduardo Serra y también la esposa de Fernández Sousa forman parte de la comisión que ha aprobado elevar la retribución del presidente
El consejo de Pharmamar aprobó el viernes la subida del retribución de Fernández Sousa, pero no ha determinado todavía los objetivos cuantitativos concretos para el año 2021 correspondientes al tramo reglado de la retribución variable máxima.
La retribución variable anual de Fernández Sousa consta de dos tramos. El primero es de carácter reglado y lo componen objetivos cuantitativos, que deben hacer referencia a cifras de ventas e ingresos.
El segundo tramo es de carácter discrecional, y deber ser decidido por el consejo de administración a la vista de criterios que hacen referencia, entre otros factores, a la creación de valor para el accionista.
"No se hace más que reconocer el cambio de valor generado para la compañía después de tanto tiempo y esfuerzo", comentaron fuentes de Pharmamar a este diario el martes, cuando se consultó a la empresa sobre el incremento aprobado sobre la retribución de Fernández Sousa.
En 2020 Fernández Sousa percibió una retribución total de 3,7 millones de euros (1,4 millones en 2019). Las previsiones sobre el negocio de Pharmamar y su valor en Bolsa para este año y el próximo pocas veces han sido tan optimistas como ahora.
En 2020 PharmaMar logró el mejor resultado de su historia, un beneficio de 137 millones y 270 millones de ingresos
La compañía ha superado la barrera de los 2.000 millones de euros de valor de mercado y en 2020 registró el mejor resultado de su historia, 137 millones de euros de beneficio, e ingresos de 270 millones, un 215% más que un año antes.
"En virtud de las buenas perspectivas futuras", informó el grupo la pasada semana, se ha acordado proponer a la Junta General de Accionistas un dividendo en efectivo por importe de 0,60 euros brutos por acción.
Aunque buena parte de los beneficios obtenidos por PharmaMar el pasado año respondieron a acuerdos de licencia firmados con la estadounidense Jazz Pharmaceuticals, que pudieran no repetirse este año, las expectativas de ingresos y beneficios del grupo español podrían dispararse si lograra el permiso regulatorio para comercializar su medicamento Aplidin contra el coronavirus.
El pasado día 17 de febrero Pharmamar informó que había obtenido la autorización de la Agencia Británica del Medicamento para que pacientes del país participen en el ensayo clínico de Fase III (la anterior a su posible comercialización), que determinará la eficacia de Aplidin para el tratamiento de pacientes hospitalizados con infección moderada de la covid-19.
Si PharmaMar logra la aprobación para la venta de su fármaco contra el coronavirus, la compañía española habrá logrado un hito en el desarrollo farmacéutico español del que se beneficiarían pacientes de todo el mundo. Y también los accionistas de la compañía y su presidente.
Carabino
Todo va muy bién ,si, pero no sería de extrañar que un cambio de orientación de la empresa, la pusiera a punto de caramelo para ser comprada por grupos inversores foráneos,,cosas mas raras, y sorprendentes ya sucedieron. Véase sino el caso de Pescanova, y Abengoa, empresas modélicas, saneadas y mas que rentables, reducidas a la nada por causa de una gestión cuando menos imprópia..
Mazarino
EL PP ES TAN MASÓN COMO LO PSOE.Rajoy no tocó las leyes masónicas de ZP porque es un masonazo y me temo que Feijoy seea masoncete también