En el primer mes del año, el 60% de los productos que el INE recoge en la cesta de la compra aumentaron sus precios respecto al mes anterior. De hecho, las subidas de precios se han sentido más allá de la factura de la luz, las gasolineras y los supermercados. Hay otros productos y servicios claves para los hogares y que en enero fueron al menos un 2% más costosos que apenas un mes antes, en diciembre, cuando la inflación alcanzó su máximo en décadas (6,5%).
Los datos publicados por el Instituto Nacional de Estadística (INE) reflejan un crecimiento mensual en los precios de los seguros privados relacionados con la salud (un 4% más); en la prensa diaria (3,2%); en la categoría ‘otros muebles y accesorios’ (3,1%); en las lavadoras, secadoras y lavaplatos (2,9%); en los automóviles nuevos (2,5%), en los frigoríficos y congeladores (2,4%), en cocinas (2,3%), y en ‘otros equipos para la recepción, registro y reproducción de sonido e imagen’.
En el lado opuesto están los paquetes turísticos nacionales y las prendas de vestir, que redujeron sus precios un 17% y un 14%, respectivamente. Esto es algo habitual teniendo en cuenta que en diciembre, con las vacaciones y los regalos de Navidad, las empresas de viajes y textiles aprovechan para subir precios que, un mes después, rebajan.
De esta forma, el INE confirma un ‘contagio’ progresivo de los precios energéticos al resto de productos y servicios que tiene en cuenta para elaborar el IPC. Así lo demuestra el hecho de que la inflación subyacente (índice general sin alimentos frescos y productos energéticos) aumentará en términos anuales hasta el 2,4%, su máximo en diez años.
El IPC, en niveles récord
Hay que tener en cuenta que algunos de estos productos ya habían sufrido incrementos en el precio en los meses anteriores. El IPC cerró el año en el 6,5%, un nivel no visto en casi treinta años. En esto tuvo mucho que ver la electricidad, los combustibles y otros productos energéticos, que contagiaron a su vez los precios de los productos alimenticios, con incrementos en la carne, el pescado, la leche o la fruta. De esta forma, los precios de una cuarta parte de la cesta de la compra crecieron por encima del 5%.
En enero, el IPC creció un 6,1%, cuatro décimas menos de lo que lo hizo en diciembre. Esto se debió, fundamentalmente, a la factura de la luz, que ha dado un ligero ‘respiro’ respecto al mes anterior (con una reducción del 3,5% en los precios), aunque sigue en niveles récord (un 46% más que en enero de 2021). No obstante, el gas natural, el gasóleo y la gasolina continuaron su escalada, con crecimientos intermensuales del 6%, 3,6% y 2,6%, respectivamente. En términos anuales, pagamos un 26% y 23% más de gasóleo y gasolina que hace un año, respectivamente.
Además, algunos alimentos siguieron engordando su coste, como el arroz (5,5% más que en diciembre), mantequilla (4,9%), pescado fresco (4,1%), frutas en conserva (2,9%) y pastas (2,7%). En comparación con enero de 2021, la subida de precios es todavía más acusada: un 20% las pastas, un 13% la carne de ovino, un 9% las frutas, un 8% el arroz, y un 6,6% la leche, entre otros productos.
Otros productos y servicios incluidos en la cesta de la compra que elabora el INE también crecieron más de un 5% respecto a enero de 2021, como los hoteles y otros servicios de alojamiento (18%), las comisiones bancarias (11%), los periódicos diarios (7%), las bicicletas (7%), los muebles (6%), las plantas (6%), o los utensilios de cocina (6%), entre otros.
De hecho, sólo uno de cada diez productos de la cesta de la compra no ha sufrido ninguna variación en sus precios respecto a enero de 2021 o, incluso, se han reducido. Entre los que se mantienen igual se encuentran el transporte en tren o en metro, los servicios de telefonía fija, los juegos de azar y los servicios jurídicos y contables. Finalmente, los peajes son ahora un 21% más baratos que en 2021; los vuelos internacionales, un 9%; y el transporte de pasajeros por mar, un 3,5%.
La inflación superará el 5% hasta agosto
La Fundación de las Cajas de Ahorro (Funcas) estima que el IPC volverá a repuntar en febrero hasta el 7,1%, superando en un punto la tasa de enero. El centro de análisis espera tasas superiores al 5% hasta agosto, cuando la variación anual del IPC se situará, según sus cálculos, en el 4,6%. De hecho, no será hasta diciembre cuando se modere la subida de precios por debajo del 2%.
De esta forma, Funcas ha elevado en nueve décimas el IPC medio previsto para este año, del 3,7% al 4,6%. No obstante, advierte que en un escenario tensionado en el que el precio de la electricidad continúa ascendiendo durante la primavera, la tasa media anual se elevaría hasta el 5,2%.
De esta forma, se alinea con las previsiones de Caixabank Research, que situaba hace unos días el IPC medio de España en el 4,55% este año, frente al 3,05% de Alemania, el 2,77% de Francia, o el 2,72% de Italia. Es decir, que si se cumplen estas previsiones, España acabará el año con la inflación media más alta de las grandes economías del euro.