La vivienda nueva a la venta se devaluó en un 4,2% interanual en Cataluña al cabo de la primera mitad de 2021, según un informe de la consultora de inversiones inmobiliarias Colliers.
La devaluación parece responder al incremento de la oferta por la decisión de propietarios de pisos en alquiler de ponerlos a la venta ante la entrada en vigor de medidas gubernamentales de intervención sobre el mercado. Entre estas sobresalen la ley de limitación de rentas de la Generalitat, en vigor desde septiembre de 2020 y adoptada por el ayuntamiento de Barcelona, y la imposición desde 2019 por parte del Consistorio que dirige Ada Colau de un 30% de vivienda de alquiler social a las nuevas promociones residenciales.
La caída en los precios en Cataluña contrasta con la revalorización de la vivienda en el conjunto del Estado y en puntos comparables por sus similares dinámicas de mercado, como Andalucía y Madrid, donde la obra nueva sigue encareciéndose.
La consecuencia más peligrosa de estos fenómenos pasa por una reducción de la oferta de pisos en alquiler en Cataluña que podría dificultar el éxito de la referida ley a la hora de facilitar el acceso a la vivienda.
Ya los notarios habían constatado una caída en general de los precios de las viviendas en edificios no unifamiliares en Cataluña (del 1%) pese a un rebote de transacciones similar al del resto de las CC.AA., donde el precio sigue subiendo (2% de media).
La proporción de viviendas que no se han vendido sobre las terminadas ha sido del 30,2% en Cataluña desde 2019, frente al 21,9% de Madrid y el 19% de Andalucía, pese a que el número de casas finalizadas ha sido mayor tanto en la comunidad andaluza como en la madrileña.
Barcelona tuvo una tasa de absorción del 69% en el primer semestre de 2021 frente al 90% de Madrid
"Uno de los mejores indicadores para medir el comportamiento de mercado residencial es la absorción de vivienda, que se obtiene comparando el número de transacciones de obra nueva respecto al de viviendas terminadas", explican desde Colliers.
"En el primer semestre del año 2021 la tasa de absorción se ha situado en el 80%, manteniéndose ligeramente superior a los niveles alcanzados en los últimos dos años. De los grandes mercados, las provincias de Madrid (90%), Valencia (105%) y Málaga (88,5%) presentaron ratios de absorción muy buenos. En cambio, las tasas de absorción de los mercados de obra nueva en Barcelona (69%) y Sevilla (73%) tuvieron un peor comportamiento".
Freno en la inversión en vivienda en Cataluña
Todo ello mientras la inversión en vivienda nueva se ha estancado en Barcelona frente a los incrementos de otros puntos del mercado como Sevilla, Málaga y Madrid, informó este medio a partir de los datos de visados de obra nueva.
La apuesta por nueva vivienda sufrió un freno en el entorno de la Ciudad Condal al cabo de la primera mitad de 2021, con un descenso del 2% respecto a 2020, en contraste con Madrid y Sevilla, donde las casas iniciadas subieron un 24% y 60% respectivamente.
En el primer año de la limitación de precios, coincidente con el rebote postcovid en la demanda, la cantidad de pisos en alquiler en oferta cayó un 42% en el entorno de Barcelona (unos 9.000 anuncios), frente a un 22% en Madrid
La consecuencia más peligrosa de estos fenómenos pasa por una reducción de la oferta de pisos en alquiler en Cataluña que podría dificultar el éxito de la referida ley de tope de rentas a la hora de facilitar el acceso a la vivienda.
En el primer año de la limitación de precios, coincidente con el rebote postcovid en la demanda, la cantidad de pisos en oferta cayó un 42% en el entorno de Barcelona (unos 9.000 anuncios), frente a un 22% en Madrid, según datos del portal de anuncios Idealista. Más del 97% de los pisos en oferta en Barcelona se anuncian por precios superiores al 35% de los ingresos del ciudadano medio (el 95% en el caso de Madrid).