El 63,8% de los economistas catalanes considera que la situación política actual perjudica a la economía de Cataluña. Así lo recoge la Encuesta de Situación Económica de Otoño de 2019 realizada por el Colegio de Economistas de Cataluña entre unos 2.000 profesionales de este sector. El mismo estudio recoge, sin embargo, que para el 43% de los encuestados la situación económica es igual a la del año anterior, mientras que solo un 10,8% considera que ha mejorado.
La encuesta ha sido presentada hoy por el decano del colegio, Antoni Gasol, y responsable técnico de la misma, Xavier Segura. Gasol ha indicado que las principales preocupaciones de los colegiados en estos momentos son cuestiones directamente relacionadas con la política: la situación política en sí, el déficit fiscal con el Estado, las deficiencias en infraestructuras y la falta de reformas estructurales.
La preocupación en lo que a la situación política se refiere ha escalado siete puntos este año entre los economistas catalanes y con respecto al año anterior. “Hay una acentuación de que los problemas son no resolución de las responsabilidades políticas y todo lo demás es una derivada”, ha explicado. Sin embargo, ha señalado también que, a pesar de todo, la actividad económica en Cataluña “va tirando”, según informa Europa Press.
Altercados sin consecuencias
Gasol, por otro lado, ha negado que los altercados que se registraron en Cataluña tras la publicación de la sentencia del 1-O hayan afectado especialmente a la economía. En su opinión, es “exagerado y atrevido” realizar “una estimación sobre la consecuencia sobre la pérdida económica”, ha afirmado el presidente de los economistas catalanes.
En lo que al índice de confianza se refiere, la encuesta recoge el “sentimiento” de los colegiados ante la situación económica, que ha disminuido respecto a 2018, bajando hasta el 5,39 para la economía catalana y el 5,09 para la estatal. Si se pregunta por la nota que le dan a ambas economías para finales de este 2019, los economistas aprueban a la economía catalana con un 5,07, mientras que suspenden con un 4,81 a la estatal.
Durante la presentación de la encuesta, Antoni Gasol ha recordado cuáles eran las preocupaciones en el sector hace 15 y 10 años. Si en 2004 los economistas catalanes estaban preocupados por las deficiencias en infraestructuras y los precios del petróleo y los carburantes, cinco años más tarde los principales problemas detectados eran el paro y la debilidad de la demanda interior.
Por otro lado, desde el Colegio de Economistas se espera a que este año la Generalitat sí pueda aprobar sus presupuestos. Algo que desea más del 88% de los casi 2.000 economistas encuestados. Para el 7% no es algo imprescindible, mientras que un 4,4% ha preferido no posicionarse.